Viernes 14 de febrero de 2025, p. 5
Washington. El presidente estadundiense, Donald Trump, prometió destruir los cárteles mexicanos y poner fin a la epidemia de fentanilo en su país, pero su decreto de congelar radicalmente la ayuda en el exterior detuvo temporalmente los programas antidrogas financiados por Washington en México que durante años han trabajado para frenar el flujo del opioide sintético a Estados Unidos.
Todos los programas de la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley (INL) del Departamento de Estado estadunidense en México hoy están suspendidos debido a la congelación de fondos, informaron a Reuters cinco personas familiarizadas con el asunto.
Una aseguró que Washington estaba considerando una exención para permitir la financiación de programas antinarcóticos extranjeros, pero no estaba claro si los proyectos de INL en México estaban entre ellos. Dos de las fuentes añadieron que hasta ahora los proyectos de la agencia en México no han recibido exenciones.
Los programas se centran en gran medida en desmantelar la cadena de suministro de fentanilo, según los documentos presupuestarios del Departamento de Estado. Entre sus actividades está el entrenamiento de las autoridades mexicanas para hallar y destruir laboratorios clandestinos de fentanilo e impedir que los químicos necesarios para fabricar esa droga ingresen a México.
Organizaciones terroristas
Por otra parte, Washington comenzó a trabajar en su plan para designar organizaciones terroristas
a los cárteles mexicanos, medida que faculta al gobierno de Estados Unidos a imponer amplias sanciones económicas a quienes estén ligados a ellos.
Al menos ocho grupos con raíces en América Latina serían declarados organizaciones terroristas extranjeras, dijeron funcionarios estadunidenses que hablaron bajo condición de anonimato con el periódico The New York Times (NYT).
Las bandas mexicanas que estarían en la lista son los cárteles de Sinaloa, el Jalisco Nueva Generación, el del Noreste, la Familia michoacana y los cárteles Unidos, según el NYT. Están contemplados el Tren de Aragua (Venezuela), Mara Salvatrucha o MS-13, pandilla de salvadoreños en Estados Unidos, y el Clan del Golfo, de Colombia.