Una de las preocupaciones centrales del Instituto Nacional Electoral (INE) como organizador de la elección judicial del domingo 1º de junio, es la participación ciudadana y, en consecuencia, la posible apatía del electorado.

En la primera propuesta para atender este factor se indica que la población del norte del país y del Bajío reportan las tasas más bajas de asistencia a las urnas en los ejercicios no tradicionales, como las dos consultas ciudadanas nacionales, realizadas en 2021 y 2022, con índices de participación muy bajos, inferiores a 18 por ciento.

Además, debido a que no existe precedente en México de comicios de este tipo, el INE analizó el caso de Bolivia, donde el voto es obligatorio y, por tanto, hay tasas de hasta 84.2 por ciento de participación; sin embargo, el hallazgo en la elección judicial de 2017 es que 50.9 por ciento fueron votos nulos, seis puntos más que en la contienda previa, la de 2011, como posible expresión de rechazo o indiferencia de la población de ese país a estos ejercicios electivos.

Por lo pronto, el INE prevé, según la disponibilidad presupuestaria autorizada para 2025, enfocarse en plataformas digitales, hacer foros estatales y distritales, y actualizar la aplicación APPrende para que los electores practiquen su voto y se familiaricen con los conceptos claves de la referida elección de ministros, magistrados y jueces.

No obstante, en este informe se destaca un estudio de la UNAM (2017) según el cual menos de 30 por ciento de las personas entrevistadas manifestó interés por los asuntos judiciales; tres años después, en una encuesta del INE, 57.2 por ciento de la población indicó confiar poco o nada en las personas que ejercen como juzgadores, de ahí que ubicó al Poder Judicial en los niveles más bajos de confianza en comparación con otras instituciones como las fuerzas armadas, el INE y la Presidencia de la República.

Motivar a los jóvenes, entre los objetivos

Uno de los objetivos del INE es motivar a los jóvenes, debido a que una cuarta parte de la población tiene entre 18 y 29 años de edad, y registra los menores niveles de votación; la entidad con el mayor número de electores es el estado de México (13 millones de registros), seguida de la Ciudad de México, Jalisco y Veracruz; estos dos últimos, con asistencia a las urnas en la más reciente elección por debajo del promedio nacional, y además, hay una diversidad creciente de los votantes, por ejemplo, más registros de población no binaria.

En ese contexto, resalta que las elecciones presidenciales tienen mayor interés para la población, a diferencia de las intermedias, pero en el sótano de la estadística se encuentran las consultas ciudadanas recientes (Consulta Popular y Revocación de Mandato), pues a pesar de los esfuerzos realizados –dice el INE– en la primera, en 2021, la segunda alcanzó apenas 17.78 por ciento de participación, contra 60 por ciento, promedio nacional, en la elección federal de junio del año pasado.

Otro elemento a considerar es hacer un monitoreo para detectar de manera temprana posibles obstáculos y áreas de oportunidad y tomar acciones correctivas, sobre todo de la motivación para ir a votar por personas juzgadoras.