▲ Este año se lleva a cabo la edición 31 del Festival Surva, que marca la culminación de las celebraciones tradicionales de invierno, las cuales se conservan como parte de la tradición folclórica búlgara desde la antigua época tracia hasta la actualidad. En la ciudad de Pernik, cercana a Sofía, Bulgaria, se dan cita grupos de kukeri, sobre todo de los países de los Balcanes, que portan disfraces que cubren la mayor parte de su cuerpo y máscaras de madera decoradas, para realizar su danza tradicional y ahuyentar a los espíritus malignos, pedir salud, buena suerte y abundancia. Este ritual figura en la lista del patrimonio inmaterial de la humanidad de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, y se cree que está ligado a la fertilidad y las buenas cosechas, herencia que comparten con la historia del resto de carnavales europeos.Foto Ap