Saqueos, otro reto para las autoridades
La policía de Los Ángeles arrestó a 6 personas acusadas de iniciar pequeños siniestros que han sido sofocados
Jueves 16 de enero de 2025, p. 23
Los Ángeles. Los fuertes vientos de Santa Ana regresaron a Los Ángeles la madrugada de ayer, mientras el número de muertos por los incendios forestales que continúan activos se elevó a 25. Las llamas de Eaton y Palisades han quemado más de 16 mil hectáreas y están controlados en 45 por ciento el primero, y en 18 por ciento el segundo.
El Servicio Meteorológico emitió ayer alerta roja
, desde la zona de la costa central hasta la frontera con México.
Sin embargo, bomberos y policías enfrentan nuevos desafíos y ya han arrestado a media docena de personas acusadas de iniciar pequeños incendios que fueron rápidamente sofocados.
Un sospechoso prendió fuego a un árbol porque le gusta el olor de las hojas quemadas
, declaró el jefe policial Jim McDonnell. Otra persona afirmó que disfrutaba causando caos y destrucción
.
Aún no han sido determinadas las causas de los incendios principales, que podrían convertirse en el desastre más costoso de la nación, con pérdidas de 275 mil millones de dólares.
Las autoridades, que fueron criticadas cuando se agotaron los hidrantes, ahora son cuestionadas porque, según fuentes consultadas por Los Angeles Times, decidieron no duplicar el número de bomberos de guardia el martes, cuando aumentaron los vientos, y sólo se desplegaron cinco de los más de 40 aparatos; tampoco llamaron a los que estaban fuera de servicio, hasta después de que estalló el incendio en Palisades.
Batallones de matafuegos de todo el país y el contingente de brigadistas de México trabajan para controlar los puntos calientes que aún podrían arder, informó la jefa de bomberos de Los Ángeles, Kristin Crowley.
Pero también laboran voluntarios que técnicamente ni siquiera se supone que estén allí, como Chuck Hart y su equipo de construcción, quienes limpian escombros en las calles de Palisades.
Debido a los bloqueos que impiden la entrada al área, no pueden salir porque no podrían volver a entrar y tienen que introducir de manera ilegal equipos y suministros
para completar su tarea.
Nos quedamos en mi casa. Dormimos en el suelo, en mis tatamis de jiu-jitsu, en mis sofás, en mis camas no hay agua caliente, el agua de las duchas es fría, 31 tipos... es terrible
, cuenta Hart.
Al principio, pagó a su equipo de su propio bolsillo, pero luego lanzó una campaña en el sitio GoFundMe con la cual lleva recaudados 170 mil dólares.
Me quedé para proteger la zona donde trabajo y también para salvar la empresa, porque ahí está la casa de mi patrón
, explicó uno de sus empleados, Paul López Acosta.
En tanto, la policía reportó aproximadamente 50 arrestos por saqueos, volar drones en zonas de incendios, violar el toque de queda y otros delitos. Entre los acusados de aprovechar la situación de emergencia para robar hay un grupo que sacó un premio Emmy de una casa evacuada, refirió el fiscal del distrito del condado Los Ángeles, Nathan Hochman.
Una de las pocas construcciones que permanecen en pie en Altadena es la de Kaylin Johnson y su familia, quienes decidieron quedarse para vigilar y evitar saqueos, y rociar las propiedades de sus vecinos.