La justicia argentina desestimó este fin de semana una causa contra el ex presidente boliviano Evo Morales, acusado de delitos sexuales y abuso de menores, al no encontrar elementos suficientes para su procesamiento. El fiscal Eduardo Taiano señaló que no se pueden judicializar los artículos periodísticos o de los informes de Internet.

El juzgado criminal y correccional federal 2 del Poder Judicial de Argentina, resolvió que el caso es “presunción sin asidero legal.

De conformidad con las normas que rigen la materia, resuelvo desestimar la presente denuncia, acorde con las normas por el artículo 180 de código procesal penal de la nación, dice la parte resolutiva del dictamen, documento al que accedió la agencia de noticias Fides.

En noviembre de 2024, el ex ministro de Economía del gobierno de la ex presidenta de Bolivia de facto Jeanine Áñez (2019-2020), Branko Marinkovic, presentó una denuncia contra Morales, tras conocer que durante su asilo político en Argentina convivía con menores de edad. Entonces, la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, confirmó la apertura de la investigación penal.

El documento fue emitido el 28 de octubre de 2024, pero recién publicado, señala que las actuaciones comenzaron el 18 de octubre por la denuncia que interpuso el director nacional de Normativa y relaciones con los Poderes Judiciales y ministerios públicos del ministerio de Seguridad, Fernando Soto, a solicitud de Marinkovic.

A la vez, señaló que el denunciante presentó recortes de los diarios La Nación, de Argentina, y El Deber, de Bolivia. Al respecto, Taiano señaló que no se pueden judicializar a partir de escritos en medios masivos.

La prudencia observable en materia de denuncias penales aconseja la no judialización automática de artículos periodísticos o informes obtenidos de Internet ocanales de televisión con conjeturas apresuradas en tanto la ley requiere que el denunciante haya presenciado dicha comisión o tenga conocimiento de su perpetración por medios fehacientes, dice la parte considerativa.

La misma autoridad observó que la denuncia se fundamentó en esas evidencias en consecuencia consideró que sólo es una presunción sin asidero legal con escueta argumentación fáctica.

En Bolivia, seguidores evistas aplaudieron la decisión, mientras que sus opositores lamentaron la impunidad del líder cocalero.