Berlín. El castillo de Neuschwanstein ha sido reconocido como patrimonio de la humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés) y abre la puerta al reconocimiento de otros edificios historicistas del siglo XIX.

La edificación, construida por el rey de Baviera Luis II (1845-1886), se suma a la lista y tumba los argumentos contrarios a las voces que dan más valor a los edificios medievales originales.

Es un caso especial. Es muy conocido y popular, afirma el etnólogo Christoph Brumann. Su inclusión hace más probable que se admitan sitios culturales de segunda fila”, argumentó el etnólogo Christoph Brumann.

Construcciones como el castillo de Neuschwanstein se consideraban hasta no hace mucho de segunda categoría, según Brumann, quien atribuye a este motivo que haya tardado tanto en ser incluido en la lista de la Unesco.

Durante mucho tiempo, la fantasía de un rey no se consideró a la altura de los edificios medievales genuinos, según Brumann, profesor del Instituto Max Planck de investigación etnológica de Halle.

Sin embargo, algunos ven en estas declaraciones un peligro. El periodista italiano Marco D’Eramo advirtió hace 10 años del llamado Unesco-cidio, alertando que la inclusión en su lista mundial podría ser un beso de la muerte.

De manera frecuente, el listado parece querer curar la enfermedad matando al paciente, según Brumann. Agregó que si la lista reconoce un sitio como digno de protección, esto puede conducir a un nivel de turismo insostenible.

Como etnólogos, somos muy escépticos sobre las clasificaciones culturales, subraya Brumann. Las nuestras probablemente serían distintas de las occidentales convencionales. Por eso se interesó hace años por la forma en que la Unesco selecciona lo que luego se califica de valor universal excepcional.

Alemania cuenta ahora con mil 223 sitios declarados patrimonio de la humanidad, 952 culturales y 231 naturales, entre ellos la catedral de Colonia, el palacio de Sanssouci de Potsdam o los edificios de la Bauhaus.