De enero a noviembre de este año, la Secretaría de Movilidad (Semovi) suspendió 859 unidades de transporte público concesionado, de las cuales 171 fueron remitidas a depósitos vehiculares por diversas irregularidades, entre las que destacan malas condiciones físicomecánicas y falta de documentación.

La dependencia señaló que se han realizado 413 operativos en distintos puntos de la Ciudad de México, en los cuales se revisaron alrededor de 2 mil 104 vehículos.

Por su parte, el Instituto de Verificación Administrativa (Invea) informó que en cuanto a las faltas detectadas en las visitas de su personal, se encontró que los concesionarios o permisionarios del servicio público y privado de transporte alteraron en cualquier forma, diseño, estructura y construcción original las unidades.

A lo que se suman la alteración de las tarifas vigentes, no contar con póliza de seguro vigente ni licencia para conducir, así como no respetar el derecho de paso de peatones, ciclistas y motociclistas en la vía de circulación.

Destacó que los operativos de visitas de verificación en materia de transporte se realizan diariamente de manera itinerante en diferentes zonas y que la selección de los puntos específicos se basa en denuncias y/o quejas ciudadanas, así como solicitudes interinstitucionales, en coordinación con la Semovi.

El Invea indicó que la suspensión implica que no podrá circular hasta que subsane la irregularidad por la que fue sancionada la unidad.

De acuerdo con información de la Semovi, los lugares donde se realizaron más inspecciones fueron el Centro de Transferencia Modal (Cetram) Mixcoac, las inmediaciones de la estación del Metro con el mismo nombre, así como el Cetram Ciudad Universitaria y los alrededores de la estaciones Puebla, Tacubaya y General Anaya del Sistema de Transporte Colectivo, entre otras.