Este año fue de grandes cambios y conmemoraciones en el arte dancístico, pero también se sufrió la pérdida de algunas leyendas que dejaron un legado en la historia de la danza, como el maestro japonés Ushio Amagatsu, la figura más importante del butoh (después de sus fundadores, Tatsumi Hijikata y Kazuo Ohno), quien falleció el pasado 25 de marzo a los 74 años.

Nacido en Yokosuka, prefectura de Kanagawa, Amagatsu conmovió, cimbró y dejó profundo impacto en los espectadores con su compañía, Sankai Juku, que fundó en 1975.

La también discípula de Kazuo y Tatsumi, Natsu Nakajima, murió a los 80 años el pasado 3 de marzo en la Ciudad de México. La maestra visitó el país para ofrecer conferencias y talleres, además de presentar su libro Al desaparecer van naciendo: La poética butoh.

La bailarina, coreógrafa, maestra e investigadora Anadel Lynton, referente de la danza en México por su labor educativa, murió a los 86 años, el pasado 5 de julio. La cofundadora del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de la Danza José Limón enfocó sus 75 años de carrera en la danza como herramienta artística de expresión.

Este 2024 fue motivo de celebración para la maestra Gladiola Orozco, quien cumplió 90 años el pasado 9 de octubre, por lo que el Centro de Producción de Danza Contemporánea (Ceprodac), dirigido por Cecilia Lugo, le rindió un homenaje en marzo con una función especial en el Palacio de Bellas Artes.

Con la desaparecida compañía Ballet Teatro del Espacio, que codirigió con Michel Descombey (1930-2011), Orozco logró dejar huella y contribuyó en la formación de generaciones de bailarines.

Figura emblemática en el mundo de la danza, Elisa Carrillo Cabrera ofreció el 17 de marzo una clase masiva en el Zócalo de la Ciudad de México, donde miles de participantes, en su gran mayoría niñas y mujeres jóvenes, tuvieron la oportunidad de ser guiados por la premio Benois de la Danse 2019 y bailar una coreografía que se montó ese día.

Meses después, el 7 de julio, Carrillo cerró un capítulo como primera bailarina del Staatsballet de Berlín después de 17 años, en una gala que ofreció la agrupación.

En su despedida, la bailarina mexicana interpretó el ballet Caravaggio, de Mauricio Bigonzetti, junto con el bailarín Giovanni Princic, así como el solo Tué, dirigido por el coreógrafo alemán Marco Goecke. Posteriormente, en agosto, Carrillo regresó a México para presentar su tradicional Festival Danzatlán.

Isaac Hernández, a NY

En junio, el bailarín Isaac Hernández se despidió del San Francisco Ballet y anunció que se uniría al American Ballet Theatre, en Nueva York, como artista invitado en la temporada de otoño de 2024; en enero de 2025 se integrará como primer bailarín principal de manera oficial.

Entre las agrupaciones dancísticas que conmemoraron su aniversario este año se encuentra la que fundó hace 35 años Vicente Silva Sanjinés, quien celebró con una presentación en la sala principal del Palacio de Bellas Artes. La compañía que lleva el nombre de su fundador interpretó el 30 de julio la pieza Caleras, creada entre 1992 y 1993, y cuyo proceso creativo se desarrolló en la Colonia Penal Federal de Islas Marías, en Nayarit.

En septiembre pasado, Vicente Silva recibió la Medalla Bellas Artes en Danza 2024 por su trayectoria. La maestra Leticia Alvarado también fue galardonada con dicha presea en la disciplina de danza, pero de 2023.

Otras compañías que conmemoraron sus aniversarios son el Ballet Provincial, creado por Lila López en 1964; la agrupación fundada y dirigida por Leticia Cosío, ¡Viva Flamenco!, celebró dos décadas, así como el Laboratorio Escénico Danza Teatro Ritual, fundado hace 20 años por la coreógrafa y bailarina de butoh Eugenia Vargas, y Caña y Candela Pura: Compañía de Música y Danza Flamenca, que con la dirección de Lourdes Lecona festejó 36 años.

Con motivo del 90 aniversario del natalicio de la maestra Gloria Contreras, el Taller Coreográfico de la Universidad Nacional Autónoma de México deleitó a cientos de espectadores con el programa 90 veces Gloria en la sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario (CCU).

Con la dirección de Irina Marcano, nombrada directora de la agrupación universitaria a principios de año, se interpretaron obras que hicieron un recorrido por la trayectoria de Contreras.

La Compañía Nacional de Danza, que codirigen Elisa Carrillo y Cuauhtémoc Nájera, ofreció en septiembre una gala de ballet para celebrar nueve décadas del máximo recinto cultural del país, en el que reunió a bailarines mexicanos con carrera internacional, como Elisa Carrillo, Katia Carranza, Selene Guerrero, Anaís Bueno, Braulio Álvarez, Enrique Bejarano y José Pablo Castro Cuevas.

En la edición 52 del Festival Internacional Cervantino (FIC), en Guanajuato, se presentaron en el país Les Ballets de Monte-Carlo y la compañía brasileña Deborah Colker. La primera maravilló al público con la obra Coppél-i.A, en la que el coreógrafo Jean-Christophe Maillot revitaliza la famosa historia de ETA Hoffmann, al explorar el mundo de las máquinas autómatas.

A su vez, la bailarina y coreógrafa Deborah Colker (Río de Janeiro, 1961) interpretó con su compañía la pieza Perro sin plumas en el FIC y en el Centro Cultural Universitario. En entrevista con este diario, la creadora anunció que prepara la coreografía de la ópera El último sueño de Frida y Diego, de la compositora estadunidense Gabriela Lena Frank, que posiblemente se estrenará en 2026 en la Ópera Metropolitana de Nueva York.

La compañía Cuerpo de Indias, que fundó y dirige el colombiano Álvaro Restrepo, leyenda de la danza mundial, se presentó en la sala Miguel Covarrubias del CCU en octubre con su obra Espíritu de pájaro, un homenaje a las comunidades indígenas de Colombia.