Economía
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Relato del desencuentro comercial
 
Periódico La Jornada
Sábado 21 de diciembre de 2024, p. 12

La disputa por el maíz transgénico entre Estados Unidos y México se originó seis meses después de que entró en vigor el T-MEC, pues el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador emitió un decreto el 31 de diciembre de 2020, el cual regulaba el uso del glifosato y el maíz genéticamente modificado.

Tres años después, ante la inconformidad de los grandes productores estadunidenses se emitió el Decreto por el que se establecen diversas acciones en materia de glifosato y maíz genéticamente modificado, que abrogó el anterior para no afectar al comercio ni a las importaciones.

El documento dejó en claro que México es autosuficiente en la producción de maíz blanco, por lo que éste se destinaría a la producción de masa y tortilla.

Aclarando que no permitiría el uso del grano genéticamente modificado para esos alimentos.

En marzo de 2023 el gobierno estadunidense solicitó consultas por el decreto de 2023.

Al no concretar nada, la USTR pidió nuevas consultas en junio del mismo año.

El asunto escaló el 17 de agosto de 2023, cuando Estados Unidos demandó un panel de solución de controversias conforme al Capítulo 31 del T-MEC.

El 25 de agosto Canadá anunció su participación como tercero en el procedimiento.

México argumentó que el objetivo de su decreto es proteger el maíz nativo (cuenta con 55 razas de nativas), las prácticas agrícolas, la biodiversidad, las comunidades campesinas, el patrimonio gastronómico, la dieta de la población y el medio ambiente.

Estados Unidos aseguró que el decreto no tiene base científica, por lo que las medidas violan las obligaciones de México en el marco del T-MEC y es injusto para los productores y exportadores estadunidenses.

El país no permite la producción comercial nacional de maíz transgénico tras una decisión de 2013 de un tribunal federal. Además, este cereal es históricamente una fuente importante de alimentos para la nación y es un producto cultural y políticamente sensible.

México es el principal importador de maíz amarillo estadunidense, cuya mayor proporción es genéticamente modificado. Casi todo es para alimentar ganado, cerdos y pollos, pues la producción de maíz para forraje no es suficiente en el territorio mexicano.

En junio de este año, los gobiernos de ambos países presentaron argumentos en la audiencia del panel de disputas.

El 22 de octubre de 2024, México recibió el informe preliminar sobre la disputa. El titular de la Secretaría de Economía (SE), Marcelo Ebrard Casaubón, dijo el 13 de noviembre que había la posibilidad de que la nación hubiera perdido. No obstante, anticipó que el 14 de diciembre se conocería el informe final, el cual se dio a conocer ayer.