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Marisa Paredes era una actriz superdotada y ahora logra un carácter eterno: Almodóvar

Murió la artista y activista defensora de los postulados de la izquierda española, a los 78 años // Protagonizó películas de Pedro Almodóvar, así como de Arturo Ripstein y Fernando Trueba

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▲ La actriz española Marisa Paredes, en la entrega de un premio honorífico por su carrera en la 32 ceremonia de premios Goya en Madrid de 2018.Foto Afp
Corresponsal
Periódico La Jornada
Miércoles 18 de diciembre de 2024, p. 7

Madrid. A los 78 años, de un ataque cardiaco murió la actriz española Marisa Paredes, una de las grandes figuras de la escena ibérica de las pasadas décadas y protagonista de películas ya clásicas de cineastas como el mexicano Arturo Ripstein o los españoles Pedro Almodóvar y Fernando Trueba, entre otros.

La artista tenía muchos proyectos en puerta, entre ellos una obra de teatro, pero la muerte le llegó de repente, según informó su pareja sentimental, Chema Prado, quien reconoció que estaba muy afectado al llegar al Tanatorio de San Isidro de Madrid.

Paredes inició su carrera artística de muy niña, a los 14 años, cuando tan sólo era la hija de una portera de un edificio en Madrid. Sus orígenes de clase obrera le formaron una postura crítica frente a las injusticias y los resabios de la dictadura franquista en España, que ella misma combatió con vehemencia, como actriz y activista defensora de los postulados de la izquierda que como presidenta de la Academia de Cine, oponiéndose al avance de la extrema derecha y las empresas belicistas del entonces gobierno español de José María Aznar, que apoyó la intervención bélica unilateral en Irak, en 2003.

Goya de Honor

Pero más allá de sus defensas civiles y políticas, Marisa Paredes fue una artista y actriz con mayúsculas, con una larga y prolífica trayectoria que culminó con uno de los máximos honores de la escena en España, la concesión del Goya de Honor a toda su carrera en 2018. Con el que además se cerraba una relación amarga con estos galardones, ya que estuvo nominada en hasta dos ocasiones a obtenerlo, con sus papeles en La flor de mi secreto, en 1996 y Cara de acelga, en 1988, pero no fue la elegida.

Pero en la dilatada trayectoria artística de Marisa Paredes ha estado a las órdenes de algunos de los grandes creadores del séptimo arte, entre ellos Pedro Almodóvar, pero también a las de Arturo Ripstein, que le dio un papel en Profundo carmesí, y Guillermo del Toro, en El espinazo del diablo. También, se suman a su filmografía trabajos con Amos Gitai, Daniel Schmid, Philipe Lioret, Raoul Ruiz, Alain Tanner, Maria Sole Tognazzi, Cristina Comencini, Manoel de Oliveira y un papel muy importante para ello bajo las órdenes de Roberto Benigni, en su mítica creación de La vida es bella.

La Academia de Cine Español informó de su muerte y recordó que Paredes se formó en la Escuela de Arte Dramático de la capital, y debutó en cine a los 14 años en Esta noche tampoco, de José Osuna, y 091 Policía al habla, de José María Forqué. Durante los años sesenta y setenta realizó papeles secundarios tanto para cine como para televisión, todos ellos de obras costumbristas y de entretenimiento, entre otros motivos por férrea censura que imponía el régimen dictatorial de Francisco Franco.

Arte libre y crítico

Con la llegada de los años ochenta y de la democracia en España, se erigió en un referente de la nueva forma de entender el arte, si acaso más contestatario, libre y crítico. Como se demostró en su participación en Ópera prima, de Fernando Trueba, y después con sus primeras interpretaciones para un entonces experimental y joven Pedro Almodóvar, con Entre tinieblas. Después rodó los papeles más emblemáticos de la filmografía de Almodóvar: la diva Becky del Páramo en Tacones lejanos y la escritora Amanda Gris de La flor de mi secreto. También tuvo un papel secundario en Todo sobre mi madre, Hable con ella y La piel que habito.

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▲ La artista con el cineasta Pedro Almodóvar, con quien trabajó en las cintas Entre nieblas, Tacones lejanos y La flor de mi secreto, entre otras.Foto Europa Press

La capilla ardiente se instalará mañana por Paredes en el Teatro Español, en Madrid, y se podrá visitar a partir de las 10 horas y estará hasta las 12, así lo informó la Academia de Cine Español en su cuenta X, institución que la actriz madrileña presidió desde 2000 hasta 2003 y fue reconocida con el Goya de Honor en 2018. Durante ese periodo se produjo la gala de los Premios Goya de 2003 del No a la guerra, en la que el mundo del cine y de la actuación se mostró como un muro de contención a los planes de guerra del entonces presidente Aznar y sus alianzas con Estados Unidos y el republicanismo de George Bush. En sus intervenciones más recientes se mostró a favor del movimiento feminista y radicalmente en contra del auge de la extrema derecha y de líderes españoles como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

El presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez señaló que su presencia en cine y teatro y su compromiso con la democracia serán un ejemplo para generaciones posteriores.

Almodóvar, que se encontraba en París cuando conoció la noticia de su fallecimiento, señaló que este año estaba rebosante de vitalidad, participaba en todos los actos sociales en los que se le requería, que eran muchos, relacionados con los problemas que vive la sociedad española y mundial en general. Se había convertido en una activista muy intensa. Desde los años 70 la recuerdo como una mujer de izquierda y afortunadamente no cambió, incluso se intensificó con el tiempo.

Añadió que Marisa siempre está presente. Todos los personajes que hace se han convertido en íconos con el tiempo. Será muy recordada. Ahora, las películas que ha hecho conmigo tienen un significado mayor por el hecho de que ya no esté con nosotros. Todo lo hizo maravillosamente, porque era una actriz superdotada y ahora adquiere un carácter eterno, como si el tiempo no pudiera afectarle.

El cineasta también declaró a la cadena de televisión española TVE que es como si la muerte hubiera jugado sucio y no hubiera respetado las reglas de la existencia, su trabajo adquiere ahora una dimensión casi eterna; como si el tiempo no pudiera afectarle. Todo lo que le ponías a Marisa lo dignificaba, dijo al despedirse.

La única hija de la histrionisa, María Isasi –fruto de su relación con el director de cine Antonio Isasi– agradeció el cariño que ha recibido y expresó entre lágrimas que su madre le pertenece a todo el mundo, así que es vuestra y vuestra será siempre.

Múltiples personalidades no tardaron en reaccionar ante la noticia de su muerte y homenajearon a Paredes en sus redes sociales con emotivos mensajes que reflejan su dolor tras esta pérdida como Penélope Cruz, Aitana Sánchez Gijón,Rossy de Palma, Loles León, Antonio Banderas, Pilar del Río y organismos como el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) y la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (Amacc).

Miguel Bosé, en su cuenta de X, abrió un álbum de fotos en el cual incluye imágenes desde su etapa más joven, en blanco y negro, a la más reciente. Entre las instantáneas, añadió tomas del rodaje de Tacones lejanos, de cuyo reparto ambos formaron parte y vio nacer un gran vínculo entre Bosé y Paredes al que ahora hace alusión: Adiós a mi adorada Marisa. La vida y las aventuras vividas juntos, quedarán como un tesoro.

Con información de Europa Press