El futbol tricolor sigue sin encontrar el rumbo. Apoyado por el empresario Emilio Azcárraga Jean, Juan Carlos La Bomba Rodríguez fue nombrado hace año y medio como comisionado de la Federación Mexicana de Futbol; sin embargo, tuvo que renunciar al no cumplir con la encomienda de conseguir la aprobación total de la Asamblea de Dueños, realizada ayer en Toluca, para pactar un millonario fondo de inversión que sería inyectado a la Liga Mx.

Con la salida de La Bomba Rodríguez justo en la semana de la final del torneo y rumbo a un Mundial 2026 que será en este país, Mikel Arriola, quien se desempeñaba como presidente de la Liga Mx, fue designado como comisionado interino de la Federación y deberá continuar con las negociaciones para concretar la aprobación del fondo de inversión con la empresa estadunidense Apollo Global Management.

No obstante, Santiago Baños, presidente del América, es uno de los candidatos para sustituir de manera definitiva a Rodríguez como comisionado del futbol mexicano.

El acuerdo que Rodríguez pretendía cerrar con Apollo Global Management consistía en un fondo de inversión de mil 250 millones de dólares por 20 años a cambio de entregar entre 10 y 20 por ciento de los ingresos totales de la Liga Mx a la empresa inversora estadunidense, de acuerdo con el portal ESPN.

El club América, propiedad de Emilio Azcárraga Jean, quien también es propietario de Televisa, así como el plantel de Mazatlán, que pertenece a Ricardo Salinas Pliego, dueño de Tv Azteca, son los principales promotores del fondo de inversión. Ambos asistieron ayer la Asamblea de Dueños.

En contraste, equipos como Tigres, Monterrey, Chivas, Cruz Azul, Pachuca, León, Toluca, Pumas y San Luis habrían votado en contra del fondo de inversión al no estar de acuerdo con varios de los términos del contrato como la entrega de un alto porcentaje de sus ganancias de taquilla, publicidad e incluso de los propios derechos de transmisión.

Ahora, Arriola conformará en enero próximo un comité de 10 equipos para continuar con las negociaciones del fondo de inversión, con especial énfasis en reforzar el gobierno corporativo de la institución, así como seguir adelante con el proyecto de transformación más importante para el futbol, indicó la Federación en un comunicado.

El organismo no informó qué sucederá con Ivar Sisniega, presidente ejecutivo de la FMF, y quien llegó a ese puesto respaldado por Rodríguez, así como del amplio equipo de comunicación que fue creado en esta gestión con ex personal de Univisión.

Fallida gestión como directivo

Cuando Juan Carlos Rodríguez arribó en mayo de 2023 a la Federación tenía la encomienda de salvar al futbol tricolor tras el fracaso de la selección mexicana en Qatar 2022. La urgencia de un cambio derivó en una restructura en el organismo, pues se pretendía una estabilidad deportiva al tener en puerta el Mundial 2026, donde México será anfitrión junto con Estados Unidos y Canadá.

Rodríguez tomó el control de la FMF apoyado por Emilio Azcárraga Jean, con quien había trabajado para formar el canal deportivo de Televisa y Univisión, TUDN.

Así, la televisora de Chapultepec mantenía su dominio en el ente rector del balompié mexicano, tal como lo ha hecho desde hace décadas al imponer a ex empleados de Televisa como lo fue también Yon de Luisa, antecesor de Rodríguez como presidente de la Federación Mexicana de Futbol.

No obstante, su gestión se caracterizó por una falta de estabilidad. Diego Cocca fue destituido como estratega de la selección y en su lugar fue contratado Jaime Lozano, quien sólo se mantuvo en el puesto un año para que después arribara al timón Javier Vasco Aguirre junto con Rafael Márquez como auxiliar técnico.

La renuncia de Rodríguez sacude al futbol mexicano apenas unas semanas después de que Azcárraga Jean solicitó permiso para dejar de presidir de manera temporal al consorcio Televisa al ser demandado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos por supuestos sobornos para conseguir los derechos de transmisión de los mundiales 2018, 2022, 2026 y 2030.

Incluso, tanto Rodríguez como ninguno de los altos directivos de la FMF dieron una postura ante la polémica que enfrentaba Azcárraga.

Frente al complejo panorama, cada vez pareciera más lejano el objetivo que pretende la Federación de demostrar una recuperación del futbol mexicano en el Mundial 2026.