Viernes 13 de diciembre de 2024, p. 28
De acuerdo con un sondeo de mercado realizado por la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), las celebraciones navideñas para este fin de año se encarecerán 20 por ciento respecto a 2023.
Entre estos festejos destacan los que se llevan a cabo en centros de trabajo, escuelas y con amigos, los cuales, de acuerdo con la encuesta pasarán de un costo de 7 mil pesos el año pasado a 8 mil 400 pesos en promedio para este diciembre, considerando un grupo de 10 personas, siendo la cena de Navidad el gasto de mayor costo que llegará hasta 3 mil pesos, seguido de las bebidas con alcohol incluido 2 mil 600 pesos, botanas mil, decoraciones propias de la ocasión, 700; velas y luces de bengala, 600, y una piñata llena de dulces, 500 pesos.
A estos gastos habrá que sumar el del intercambio de regalos que no baja de 500 pesos y, por supuesto, la vestimenta en caso de estrenar, que puede implicar un gasto de entre 3 mil y 5 mil pesos por pantalón, camisa y zapatos para hombres, o vestido y blusa, en las mujeres.
Posadas, en extinción
Las posadas tradicionales con un enfoque más religioso y apegadas a las raíces culturales, se reducen a sólo uno de entre cada 10 y suelen observarse en comunidades rurales y pueblos mágicos donde las tradiciones son el eje central de la vida comunitaria con procesiones, cánticos religiosos y la representación del peregrinaje de María y José, se incluye el rezo del rosario, villancicos y la entrega de dulces y frutas, indicó la Anpec.
De acuerdo con la organización, el mundo pragmático del presente cancela cada vez más al mundo de la fe y la esperanza. Estamos cavando la tumba del porvenir y el ayer, la preocupación de vida de las nuevas generaciones se circunscribe a un presente asfixiante y frívolo
.
La inflación mata la tradición y el factor económico se convierte en el principal lastre que agüita la participación de celebraciones como la posada, incluso muchas grandes empresas, por razones de austeridad, han ido disminuyendo el tamaño del festejo para sus trabajadores y otras incluso lo han cancelado. Cada vez son menos este tipo de convivencias sociales. De ahí que podamos afirmar que las posadas se encuentran en proceso de extinción
, concluyó.