Son elementos claves de la transición energética
Insólito escenario ante el inevitable fin del petróleo como combustible global
Miércoles 11 de diciembre de 2024, p. 17
La nueva batalla entre las superpotencias económicas y políticas es por los minerales críticos o tierras raras
. Se trata de materiales indispensables para la producción de baterías, componentes de alta tecnología y la industria militar. Este mes, China anunció que dejaría de vender algunos de estos recursos a Estados Unidos, en respuesta a la amenaza del próximo presidente de esa nación, Donald Trump, de imponer aranceles al país asiático en cuanto tome posesión, el 20 de enero.
Durante más de un siglo las potencias económicas se enfocaron en una constante lucha por el petróleo, lo que desencadenó numerosos conflictos tanto bélicos como diplomáticos alrededor del mundo; el panorama global ha cambiado y ahora las dos economías más grandes del mundo: Estados Unidos y China, han trasladado la batalla a otro campo, en el que las tierras raras y minerales críticos son el centro de la disputa.
En la última década, el concepto tope del petróleo
, que hace referencia al momento en que la humanidad llegará a la capacidad máxima de extracción de crudo para luego ir en caída de forma irreversible, es un tema de todos los días, y de acuerdo con un informe reciente de la Agencia Internacional de Energía, sin bien no se sabe con certeza la fecha, probablemente
entre 2029 y 2030, la demanda y el consumo cambien claramente.
Lo anterior, a consecuencia de que la era del petróleo como gran movilizador del mundo llegará a su fin debido a la aparición de otros minerales estratégicos asociados al almacenamiento energético entre ellos litio, cobalto y grafito, a lo que se suma una serie de tierras raras
(denominación que se da a 17 elementos químicos escasos en el planeta), incluido el boro, indispensable para la fabricación de motores y baterías.
De acuerdo con la Comisión Europea, se estima que la demanda de tierras raras se multiplicará por 10 entre 2020 y 2050 y que Europa y Estados Unidos necesitarán aproximadamente 60 veces más litio para cubrir la demanda de autos eléctricos, y 15 veces más cobalto, clave en la fabricación de motores de aviones, imanes, herramientas de molienda y corte, así como dispositivos médicos y prótesis para alcanzar sus objetivos de descarbonización fijados para ese mismo periodo.
Uno de los mayores temores en la actualidad, sobre todo después de lo acontecido con las materias primas a raíz de la pandemia de covid-19 y la guerra ruso-ucrania, de acuerdo con la consultora Statista, es la eventual escasez de minerales estratégicos para la transición energética mundial, cuya producción actual está dominada por un puñado de países, entre los que destaca China.
Las llamadas tierras raras, señala un reporte publicado por BBVA Research esta semana, se utilizan ampliamente en una variedad de aplicaciones, incluido el almacenamiento de energía, los imanes permanentes con aplicaciones de defensa y para motores de vehículos eléctricos (incluidos los híbridos) y turbinas eólicas.
De acuerdo con información del Banco Mundial, China es el líder en la producción de al menos 15 de los 50 minerales que EU considera críticos
para la transición energética, además de que satisface cerca de 95 por ciento de la demanda estadunidense y europea de tierras raras. A China se le agregan países de África, como la República del Congo –aliada del gigante asiático–, que cubre 70 por ciento de las necesidades globales de cobalto.
En tanto, en América Latina, países como Argentina y Chile son responsables de alrededor de un tercio de la producción global de litio, mineral llamado a ser el petróleo del futuro por su importancia en la fabricación de las baterías para los autos eléctricos.
Algunos de los minerales considerados críticos
por EU son: aluminio, cobalto, fluorita, cobre, grafito, níquel, litio, tierras raras, tungsteno, arsénico, berilio, bismuto, germanio, hafnio, magnesio, niobio, platino, tántalo, titanio, vanadio, circonio, cesio, cromo, indio, rubidio, samario, telurio y zinc.
De acuerdo con el Servicio de Geología de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés), el país depende de las importaciones para más de la mitad del consumo previsto de productos de minerales considerados críticos
para los próximos 49 años. Actualmente Estados Unidos produce sólo 4 por ciento de su demanda de litio, 13 por ciento de la cobalto, y 0 por ciento de la de níquel y cobalto, minerales clave en la fabricación de autos y demás productos eléctricos claves para la transición.
EU vs. China
El área de estudios de BBVA destaca que actualmente China domina la producción y el procesamiento de elementos de tierras raras, ya que ese país alberga algunas de las formaciones geológicas que contienen las más productivas y de menor costo de extracción.
Aprovechando su dominio en estos elementos, destacó el banco, China anunció controles de exportación de galio, germanio y grafito en julio y octubre de 2023 como parte de una respuesta de ojo por ojo
al embargo cada vez mayor de Estados Unidos sobre semiconductores avanzados.
La medida anunciada por la Cámara de Comercio de China responde a una serie de restricciones que el gobierno estadunidense impuso al gigante asiático, las cuales impedirán vender a China 24 tipos de máquinas para la manufactura de semiconductores, así como tres programas de software considerados críticos para este rubro industrial.
Sin embargo, apuntó, algunos investigadores han descubierto que el impacto real de los controles de exportación de China ha sido insignificante, dado que la participación de China en las importaciones totales estadunidenses de estos productos básicos no ha cambiado significativamente hasta el momento. Es decir, EU le sigue comprando estos minerales.
El fracaso de estos controles de exportación chinos, expone el análisis de BBVA, plantea dudas sobre la eficacia de prohibiciones similares a las exportaciones de tierras raras para contrarrestar la nueva ola de aranceles que se prevén a China con el próximo presidente de EU, Donald Trump.
El presidente electo Trump no tiene ningún interés en la campaña global contra el cambio climático ni en la transición energética verde asociada; por tanto, es poco probable que una prohibición de las exportaciones de tierras raras le perjudique o le impulse a reconsiderar su política arancelaria
, apuntó el banco.
Enfatizó en que el dominio de la nación asiática en esos minerales se debe principalmente a su capacidad para producirlos a precios más bajos. Si China impusiera restricciones estrictas a las exportaciones, elevaría los precios globales y alentaría a otros países a aprovechar sus propias reservas
, puntualizó.
Según estimaciones del Banco Mundial, las reservas mundiales de tierras raras ascienden aproximadamente a 130 millones de toneladas métricas, de las cuales una tercera parte se encuentran en China, que lidera el ranking con aproximadamente 44 millones de toneladas. Vietnam y Brasil completan el podio, ambos países con más de 21 millones, cada uno.