Quito. Más de 200 personalidades de 15 países solicitaron ayer a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ampliar las medidas cautelares a favor del ex vicepresidente ecuatoriano, Jorge Glas (2013-2018), preso en una cárcel de máxima seguridad a la espera de un juicio por presunto peculado.

Ex jefes de Estado, destacados juristas, congresistas y representantes de organismos internacionales, academia y movimientos sociales solicitan a la CIDH ampliar las medidas cautelares vigentes, y otorgar a Jorge Glas medidas no privativas de libertad, indicó el comité internacional a favor de la libertad del ex funcionario.

En la misiva, dada a conocer en rueda de prensa digital, se expresa la preocupación por la integridad física y la salud de Glas, al cumplirse ocho meses de su captura en el interior de la embajada mexicana en Quito y su posterior encarcelamiento en la cárcel La Roca, de la ciudad de Guayaquil.

La nota añade que el ex funcionario ha sido sometido a torturas, tratos crueles, inhumanos y degradantes, así como un régimen de detención tan severo que lo llevó no sólo a realizar una huelga de hambre, sino a intentar quitarse la vida”, señaló la carta, que describe el deterioro de la salud de Glas, a quien se la ha diagnosticado transformación persistente de la personalidad tras experiencia catastrófica.

Firman carta 220 personalidades

En el pronunciamiento, firmado por 220 personalidades, el referido comité expresó su confianza a fin de que el organismo actuará con celeridad, sin influencia del calendario electoral ecuatoriano, tras las denuncias de violaciones al debido proceso y falta de atención médica especializada para el preso.

Entre los firmantes están el premio Nobel argentino Adolfo Pérez Esquivel, el ex presidente colombiano Ernesto Samper, el ex mandatario boliviano Evo Morales y el ex juez español Baltazar Garzón, así como el ex gobernante ecuatoriano Rafael Correa (2007-2017), los ex cancilleres Ricardo Patiño y Guillaume Long, así como el ex candidato presidencial ecuatoriano Andrés Arauz.

La misiva señala que el 14 de noviembre pasado, la relatora especial de la Naciones Unidas sobre la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantas, Alice Jill Edwards, advirtió que las condiciones de detención de Glas ponen en riesgo su vida y llamó la atención sobre las responsabilidades del Estado ecuatoriano.

Rehén del gobierno

Sin embargo, recientemente, la Corte Nacional de Justicia rechazó una acción extraordinaria de protección, por lo cual el comité a favor de la liberación de Glas considera que todas las vías institucionales del Ecuador en este caso están cerradas, ya que Glas es un rehén político.