Viernes 6 de diciembre de 2024, p. 27
Tijuana, BC., Unos 4 mil trabajadores de la educación, entre maestros y personal administrativo, marcharon ayer en esta ciudad para exigir que al gobierno estatal haga pública la auditoría al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Gobierno y Municipios del Estado de Baja California (Issstecali), con información sobre la responsabilidad de quienes generaron su quiebra, y el borrador de la reforma a la ley de esa institución (aunque la gobernadora Marina del Pilar Ávila ya dijo que esto último será hasta el próximo año).
Los manifestantes lanzaron consignas contra el líder de la sección 37 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Ampelio Íñiguez, a quien reprocharon haber pactado con el gobierno del estado una reforma a espaldas de los trabajadores.
Y es que en noviembre, cuando iniciaron los primeros focos de inconformidad, el dirigente de la sección 37 fue convocado a una reunión en la Ciudad de México con la cúpula sindical y ahí se tomó una foto con la gobernadora, difundida en las redes de la mandataria.
En tanto, el gobierno ha informado que el problema de las pensiones que debe enfrentar el Issstecali es más con los maestros que con los burócratas, dado que ellos se llevan 70 por ciento de los recursos destinados al pago de pensiones.
Juan Luis Serrano Velazco, maestro de primaria, sostuvo que lo importante para el magisterio es que se haga público el resultado de la auditoría y también conocer qué se estará discutiendo en la reforma al sistema de pensiones.
Temen pacto en lo oscurito con el gobierno
Aunque la gobernadora pidió a maestros y burócratas que pasen la Navidad tranquilos y que en enero empiecen a negociar, los maestros expresaron su preocupación de que la reforma se esté negociando en secreto.
Lo que ha trascendido los mantiene alertas; que su pensión dejará de ser dinámica
, es decir se congelará; se aumentará la edad para jubilarse, que actualmente es de 60 años y que los jubilados deberán seguir aportando para los servicios médicos, entre otros puntos.
Los trabajadores exigieron la presencia de sus líderes sindicales y plantearon la posibilidad de promover un amparo para exigir el abasto de medicamentos.