Coordinadora del consejo asesor empresarial
Han cambiado los paradigmas de la globalización y el capitalismo, asegura
Lunes 2 de diciembre de 2024, p. 20
El Estado debe asumir un papel activo en regular, promover y conducir la actividad económica. La afirmación es de Altagracia Gómez Sierra, empresaria de 32 años que coordina un consejo asesor de la Presidencia de la República para promover inversiones. Los proyectos que se impulsan desde el sector público no deben ser vistos necesariamente con la óptica de obtener rendimientos financieros, señala. Considera que uno de los cambios relevantes de la última década es el cuestionamiento a los conceptos de globalización y del mismo capitalismo
. El péndulo se movió como resultado de los fracasos de ciertas políticas públicas, apunta. Es en este marco que, asegura, cobra sentido la actividad en que se involucró el grupo de mujeres y hombres de negocios que ella encabeza, a petición de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Gómez Sierra es presidenta de Promotora Empresarial de Occidente (PEO). El consorcio tiene intereses en la industria alimentaria, con Minsa, productora de poco menos de un tercio de la harina de maíz para tortilla en el país. También es propietario de Dina, fabricante de autobuses y camiones, y de la firma de logística y financiamiento Almer. Las dos primeras fueron en su momento empresas públicas, privatizadas en la década de 1990.
Ahora, además de su actividad al frente de PEO, Altagracia Gómez Sierra es la coordinadora del Consejo Asesor de Desarrollo Económico Regional y Relocalización, integrado por 15 empresarios (ocho mujeres y siete hombres). Esta iniciativa fue presentada la semana pasada por la presidenta Sheinbaum. Entre los propósitos del grupo está promover inversiones en los polos de desarrollo que busca impulsar el actual gobierno en diferentes puntos del país, así como atraer a México compañías que desean acercarse desde Asia o Europa al mercado de América del Norte.
Integración irreversible
La integración de México a la región de América del Norte, con Estados Unidos y Canadá, es irreversible
, expresa la empresaria en una plática de la que participó La Jornada.
El nivel de integración es algo que juega a favor de nuestras economías, es irreversible y eso es algo que desde luego tenemos que usar y también presumir porque México ha sido parte del éxito del tratado comercial entre los tres países
, apunta cuando se le pregunta sobre sus expectativas con el nuevo gobierno de Estados Unidos.
La conversación tuvo lugar la misma semana en que Donald Trump, quien el 20 de enero asumirá la presidencia estadunidense para un segundo mandato, amenazó con instaurar un impuesto adicional de 25 por ciento a los productos que Estados Unidos compra de México y Canadá. Altagracia Gómez considera que México debe impulsar una relación no sólo de iguales, sino de reconocimiento de lo que aporta a la relación comercial más importante del mundo
.
Se refiere al valor del comercio entre los dos países. El año pasado sumó 798 mil millones de dólares, cantidad que colocó a México como el mayor socio de Estados Unidos, arriba de China por primera vez en 20 años. En promedio, cada día cruzan la frontera común mercancías con valor de 2 mil 186 millones de dólares, alrededor de 91 millones de dólares por hora.
“Las empresas tienen una mentalidad de largo plazo – expresa Gómez Sierra–. Las que invierten en México no lo hacen únicamente por las características de su gobierno, y lo mismo pasa en Estados Unidos y Canadá, porque las inversiones no se recuperan en cuatro o seis años”, dice. Hoy México reúne todas las características
para que vengan las empresas.
Bono demográfico y cambio de tendencia
Enumera: en México se gradúan 159 mil ingenieros cada año, con lo que se coloca en el sexto lugar del mundo en este terreno; es uno de los 10 países con más egresados anualmente en carreras relacionadas con ciencia y tecnología y, además, la edad promedio de su población ofrece un bono demográfico envidiable
. El país es el primer exportador de vehículos pesados, el cuarto de ligeros y el sexto de autopartes. Es una de las 17 naciones en que se producen semiconductores.
No es un accidente que formemos parte de la región más próspera; es que hemos trabajado para ello
, redondea.
Altagracia Gómez habla de la manera en que, como empresaria y coordinadora del consejo asesor, entiende el papel del Estado y en particular del gobierno.
El Estado juega no sólo como regulador. En muchas industrias es el conductor
, asegura. Y también tiene una actividad como comprador que a veces es subestimada. El Estado compra muchísimos bienes y utiliza muchos servicios. Que ahora se tenga la mentalidad de apoyar a las pequeñas y medianas empresas es una palanca de desarrollo
. Pone un ejemplo: Todos los uniformes que se utilizan en el gobierno, en todos los niveles, se pueden hacer en México, donde la industria textil ha tenido una caída importante en los últimos años. Y 80 por ciento de las empresas del sector son de microempresarios a los que debiéramos estar apoyando
.
El sector público debe desempeñar una labor muy importante en sectores como el energético y otros prioritarios, como el turismo
. Esto se ha observado en grandes proyectos, como la recuperación de Acapulco, devastado por los huracanes Otis y John, y la consolidación de proyectos como el Tren Maya, una de las obras insignia del anterior gobierno.
Y aquí se detiene: Hay una mentalidad diferente cuando un empresario entra a un proyecto y cuando lo hace el Estado, el gobierno. Pongo por ejemplo el Tren Maya. He visto en algunos periódicos que dicen que se va a pagar en 100, 200 o mil años. Y si lo miden así, no se va a pagar. Pero los trenes de pasajeros no se pagan en el mundo. Están hechos a fondo perdido para el Estado. Porque lo que se está buscando con este proyecto del Tren Maya es bienestar, no rentabilidad financiera. Este proyecto debe ser medido en función de los empleos que se generaron en el sur del país. Ahora el reto es hacerlo sostenible en cuanto a que la generación de bienestar no concluya con la obra, que quienes lo construyeron no regresen al Bajío, sino que puedan verdaderamente generar arraigo en la región, que tengan un buen trabajo, una mejor vida
.
Afirma que el Estado “no está para aparecer en Forbes”, pero sí para promover, conducir, facilitar y regular la actividad económica. Puede convivir con la iniciativa privada. La presidenta Sheinbaum ha hablado mucho de la inversión mixta, con lo cual ya se aleja de las típicas asociaciones público-privadas, con los problemas que representaban, pues muchas veces no se convertían el beneficio, pero sí en un riesgo para el Estado
.
En la última década, dice, cambiaron los conceptos de globalización y del mismo capitalismo y eso se aceleró después de la pandemia.
–Hasta hace algunos años el mensaje era al contrario, que el Estado debía replegarse –se le plantea.
–Es el péndulo. Es el resultado de los fracasos que se dan dentro de algunas políticas públicas que en algunos aspectos fueron exitosas. La función primordial del Estado es el beneficio público, no la rentabilidad financiera. Claro que debe ser cuidadoso, eficiente y privilegiar finanzas públicas sanas. Pero sí es una mentalidad diferente con la que debe entrar a un proyecto respecto de la que tiene un empresario.