Domingo 24 de noviembre de 2024, p. 6
El normalismo rural ha enfrentado por décadas una campaña de desprestigio que ha opacado
sus logros educativos, denunciaron alumnos y egresados de las escuelas normales rurales del país, quienes demandaron la reapertura de las instituciones que fueron cerradas desde 1969, pues su labor no ha dejado de tener pertinencia y aún es prioritaria para las comunidades más pobres del país
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Al concluir los trabajos del primer congreso El normalismo rural en el siglo XXI
, convocado por el Frente Nacional de Egresados Normalistas Rurales y la Escuela Normal Rural Gral. Emiliano Zapata, de Amilcingo, Morelos, se reivindicó, afirmó la profesora Minerva González Morales, presidenta del comité directivo del frente, el trabajo que realizan las normales rurales, pero también se expresó la exigencia de que las autoridades educativas federales y estatales garanticen su existencia
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Agregó que otra de las demandas tanto de especialistas como de alumnos y egresados normalistas es que las normales rurales cuenten con un currículo propio.
Queremos uno acorde a las necesidades de las comunidades donde vamos a laborar, porque actualmente los contenidos que se imparten en las escuelas normales es el mismo, cuando las realidades educativas y los contextos sociales que vivimos son muy distintos
, explicó la docente.
Campaña de desprestigio
En el encuentro, que reunió a investigadores, maestros, estudiantes y egresados de las normales rurales del país, se reivindicó la importante labor pedagógica que realiza el maestro rural, pero también la exigencia de que el Estado reabra los planteles que fueron cerrados cuando se agudizó la campaña negra contra estas instituciones formadoras de maestros
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Destacó que, pese al abandono presupuestal y de infraestructura que enfrentan las normales rurales, seguimos formando docentes con capacidad para desarrollar el pensamiento crítico de sus alumnos y de las comunidades donde se trabaja
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