Domingo 24 de noviembre de 2024, p. 6
Pekín. La labor de promover el cine mexicano al otro lado del mundo ha llevado a que, durante nueve años, alrededor de 60 películas se hayan exhibido en foros de Pekín, Guangzhou y Shanghái en el Ciclo de Cine Mexicano Contemporáneo, un festival itinerante que a lo largo de seis meses presenta una selección de lo más relevante de la cinematografía mexicana en las principales ciudades de China.
Desde que se abrió el Centro de Estudios Mexicanos en 2012, propuse que organizáramos un ciclo de cine mexicano. La primera edición consistió en presentar algunas de las películas más importantes en el séptimo contemporáneo mexicano y que no se hubieran visto en pantallas grandes de China
, narra Pablo Mendoza Ruiz, coordinador de Difusión Cultural y Vinculación de la representación de la UNAM en este país.
En esa primera muestra se presentaron Amores perros, de Alejandro González Iñárritu; Amar te duele, de Fernando Sariñana; El crimen del padre Amaro, de Carlos Carrera; Arráncame la vida, de Roberto Sneider; Luz silenciosa, de Carlos Reygadas; Parque vía, de Enrique Rivero y Preludio, de Eduardo Lucatero; selección que marcó el sello del festival para las siguientes ediciones.
La curaduría está pensada en función de cuáles han sido las películas mexicanas más exitosas cada año. Se gestionan los permisos, algunos no son tan fáciles de obtener, dependiendo de la compañía productora y así es como se va armando la selección
, abunda Mendoza. La UNAM –en colaboración con la embajada de México en China– también realiza los subtítulos de las películas, como una forma de contraprestación a las productoras que prestan los filmes.
Mendoza explica que en general no se ve mucho cine mexicano en China. La ley de exhibición cinematográfica en este país reduce el número de filmes extranjeros que se pueden estrenar comercialmente. La mayoría de esas películas son de Hollywood y el espacio que hay para otras cinematografías es muy reducido
.
También existe el Archivo Fílmico, similar a la Cineteca Nacional, donde se pueden ver películas de todo el mundo, pero lo que se muestra de México es muy poco, de ahí lo fundamental que se ha vuelto el Ciclo de Cine Mexicano Contemporáneo en la capital, Guangzhou y Shanghái.
Sí tenemos que cuidar ciertas temáticas. Aquí en China no hay un sistema de clasificación como en otros países (...) así que cualquier película que llega se supone que es apta para toda la familia
. Adicionalmente, en las pasadas ediciones del ciclo hemos puesto mucho énfasis en seleccionar películas dirigidas por mujeres, tanto directoras mexicanas como chinas
, apunta Mendoza.
En la más reciente edición del ciclo de cine mexicano se presentaron Cosas imposibles y Papá o Mamá, de Ernesto Contreras; Corazón de mezquite, de Ana Laura Calderón; Los changuitos feos de Tucson, de David E. Valdez y Enrique Castillo y Tótem, de Lila Avilés. Esta última también fue presentada la semana pasada en el Festival Internacional de Cine Estudiantil de la Academia de Cine de Pekín.
Además de promover el cine mexicano a China se está haciendo la contraparte: el Ciclo de Cine Chino Contemporáneo en México, que el año pasado se presentó en la sala Julio Bracho del Centro Cultural Universitario.
En esa primera edición se proyectaron cinco películas que contaban la geografía de China a lo largo de sus regiones, entre ellas Mongolia interior, el Tíbet y la provincia de Cantón. La segunda edición de este festival se presentará en el marco del año nuevo de China en México y llegará a la Cineteca Nacional.