Martes 19 de noviembre de 2024, p. 27
Acapulco, Gro., Damnificados de diferentes sectores de este puerto de Guerrero mantienen, hasta el cierre de esta edición, dos bloqueos en el puerto pues denunciaron que no han recibido los recursos correspondientes tras el paso del huracán John, en septiembre pasado.
Los inconformes comenzaron el primer cerco vial ayer a las 10:30, en la costera Miguel Alemán, a la altura de la glorieta de la Diana. Demandan a las autoridades el pago por los daños en sus viviendas en las colonias La Postal, Amalia Solorzano, Ampliación San Isidro y Llano largo.
Los manifestantes dijeron que cuentan con el comprobante que les entregaron, tanto los servidores de la nación como funcionarios de la Secretaría del Bienestar federal cuando fueron censados luego del paso del meteoro que provocó lluvias intensas e inundaciones del 23 al 27 de septiembre en Acapulco.
Los quejosos obstruyeron el sentido de la vialidad Diana-Centro, pero posteriormente ocuparon ambos sentidos de la vía.
Por la noche liberaron un sentido de la avenida. Turistas reprocharon a los pobladores que en pleno puente vacacional realicen sus bloqueos.
Los vecinos pidieron la presencia del delegado de los programas del gobierno federal, Iván Hernández Díaz. Subrayaron que funcionarios del Bienestar establecieron el compromiso de pago hace unos días, pero luego el servidor público Luis Ángel Romero les indicó que los apoyos se acabaron.
El segundo bloqueo comenzó a las 14 horas en la vía federal Acapulco-Zihuatanejo, en el municipio de Atoyac de Álvarez, región de la Costa Grande.
Los inconformes demandaron al gobierno aplicar el registro tras los daños ocasionados por John. Recalcaron que hay localidades de la Sierra que no han sido atendidas, como El Paraíso y poblados aledaños del municipio de Atoyac, incluyendo las comunidades de Los Laureles, de San Miguel Totolapan, además del municipio de Heliodoro Castillo.
Señalaron que hacen falta obras de vivienda y parcelas de maíz, frijol, calabaza, aguacate, y la reparación de escuelas, por lo que exigieron un verdadero registro. Acusaron que los servidores de la nación no son parejos y no fueron a todas las poblaciones.
Por otra parte, prestadores de servicios lamentaron que desde que el meteoro pasó, la marea no cede, la franja de arena sigue bajo el agua, aunque el embalse bajó su nivel el fin de semana alrededor de 50 centímetros, según marcan las rocas, la intensidad sigue en el oleaje del mar que choca bravío en los cimientos del área de restaurantes, donde se hicieron más socavones. Metros más adentro el agua salada hace una sola corriente con la laguna negra de Puerto Marqués.
Concesionarios, meseros, maestros de surf, reprocharon que no hay un acercamiento de autoridades de los tres órdenes de gobierno para perfilar programas a corto y largo plazos de la única playa del pueblo en la zona Diamante de Acapulco. Advirtieron que no se trata de solucionar el problema con un censo, sino de un plan integral para el futuro de al menos 200 familias que dependen de este sector.