Domingo 17 de noviembre de 2024, p. 7
Prácticas emergentes como el chemsex, vapear mariguana de alta potencia y consumir juntas o mezcladas diversas drogas, conllevan serios riesgos a la salud, alertó Raúl Martín del Campo, experto del Instituto Nacional de Siquiatría.
El especialista explicó a La Jornada que el chemsex consiste en consumir drogas con el propósito de tener diferentes experiencias durante los encuentros sexuales.
Es una práctica existente entre algunos grupos, donde se busca tener encuentros sexuales bajo el influjo de las drogas. Un sector que tenemos identificado es el de algunos hombres que tienen sexo con otros hombres. Usan las sustancias sicoactivas con la finalidad de incrementar el placer y el rendimiento.
No obstante, expuso que esto, además de alentar el consumo de drogas, lamentablemente a veces se asocia con prácticas sexuales de riesgo y con tener relaciones con diferentes personas en pocos días
.
Lo anterior implica exponerse a un mayor riesgo de contagio de infecciones de transmisión sexual, porque en ocasiones no se usan métodos de protección, aumenta la posibilidad de lastimarse y ser víctimas de abuso sexual o de violación.
En torno al vapeo de mariguana de alta potencia, expuso que esos dispositivos, diseñados para el tabaco, permiten cargar los cartuchos con diferentes tipos de sustancias.
“En este caso pueden ser los extractos de la mariguana: el CBD o el THC. Este último es el que más nos preocupa, porque es la sustancia sicoactiva. Desgraciadamente, se ha puesto de moda vapear lo que llaman wax (cera, en inglés)”, un derivado del cannabis que parece cera. Los usuarios pueden tener mayor posibilidad de desarrollar cuadros sicóticos porque es mucho más potente
, advirtió.
Algunos dispositivos vienen ya cargados con wax, y se compran por Internet, como los vapeadores que parecen plumas. Alertó que también está de moda hacer cocteles
de sustancias, por ejemplo, cannabis con benzodiacepinas o cannabis, que aumenta los riesgos.