Sábado 2 de noviembre de 2024, p. 6
Cuando Denise De Kalafe interpretaba el himno Señora, señora, casi al final de su concierto titulado Quiéreme más en el Lunario del Auditorio Nacional, la nostalgia se apoderó de algunas de las asistentes que, tapándose el rostro por el llanto, escucharon emocionadas la potente voz de la brasileña nacionalizada mexicana, quien las acompañó en este catártico momento y, en otros, donde le cantó al amor, al desamor, a la vida, al olvido y a la soledad.
Luego de ocho años de ausencia, la voz de Denise De Kalafe, provocó infinidad de emociones la noche del jueves en el íntimo recinto, que oscilaron entre la alegría, la expectación, los sueños y los anhelos. La cantante y compositora se entregó en el escenario; ofreció su alma, corazón y talento a sus seguidores que gozaron con el repertorio de la intérprete, quien pidió perdón
por algunos años de ausencia y aseguró que es el amor lo que mantiene al mundo de pie
.
Acompañada por ocho músicos y con Olga María como invitada especial, con quien interpretó Y después del amor, De Kalafe demostró su dominio del escenario, cantó, bailó, compartió con el público entre cada mesa y tocó el piano para acompañarse, justo en el tema que da nombre al concierto: Quiéreme más. Su audiencia se emocionó y al unísono se escucharon las voces con la letra de esa inmortal canción que alude a la entrega total, al amor infinito.
El emotivo acústico también tuvo sus inconvenientes previos, según comentó la cantante, debido a que la producción tuvo que buscar a un baterista de último momento. Esa situación no impidió que De Kalafe y sus músicos proyectaran su pasión, energía y diversidad de ritmos en una noche que se vislumbró memorable desde que se escuchó Quiero gritar, Sin amenazas, La vida no es un mar de rosas, De carne y hueso y Alma primitiva. La cantante siguió entre charlas con su público con los temas Se necesita, Espero que la soledad no me traicione, Amándote, Alma, corazón y vida y María de las flores.
¡Te amamos Denise!
se escuchó entre el público en diversos momentos del concierto, al cual asistieron amigos y personas cercanas a la compositora, así como integrantes de su club de fans que han seguido su prolífica trayectoria, que tuvo sus inicios hacia finales de la década de los años 60.
A ustedes los amo; es un gusto y alegría recibir esa energía; pido perdón a mis seguidores por esa ausencia, no vuelve a pasar
, expresó la intérprete nacida el 23 de abril en Ponta Grossa, Brasil, quien encontró en México el lugar ideal para desarrollar su carrera musical desde principios de la década de los años 70. De manera veloz se convirtió en una brasicana, un término que designa a los brasileños residentes en México, y recibió el apoyo de figuras como Marco Antonio Muñiz, Roberto Carlos y el escritor Paulo Coelho.
En el íntimo recinto de Reforma también se escucharon El asunto, El amor, cosa tan rara, y De Kalafe no olvidó dedicarle unas palabras a Holbox, ese paraíso mexicano donde actualmente reside. La energía y las emociones se conjuntaron en el acústico donde la intérprete corroboró que su legado continúa tocando fibras y ha trascendido generaciones.
Denise De Kalafe ha tenido reconocimiento internacional con éxitos como El porqué de mi canto, La vida no es un mar de rosas, Tres porqués, Amándote, Quiéreme más y El amor, cosa tan rara. Pero con la canción Señora, señora, dedicada a su madre en 1982, alcanzó enorme popularidad; esta misma ha sido versionada en diversos estilos de la música mexicana, incluyendo ranchera, norteña, grupera, balada pop y salsa, convirtiéndose en un himno para celebrar a las madres cada 10 de mayo en México y otros países.
A lo largo de su carrera, ha reditado varios de sus temas más famosos, sumando más de 20 álbumes, pero la magia de Denise no se limita a sus propias interpretaciones, porque sus composiciones han sido parte del repertorio de Rocío Jurado, Alejandro Fernández, Pandora, Daniela Romo y Francisco Céspedes, entre otros artistas.