La edición 24 de la Feria Internacional del Libro (FIL) Zócalo concluyó ayer con llenos continuos en sus foros y mayor afluencia de visitantes que ratifican que es una fiesta del libro. El encuentro deja a los organizadores muy felices, a decir de su directora, Paloma Saiz.

La promotora cultural contó a La Jornada: “en toda mi vida jamás había visto la feria como este sábado. En los estands no se podía ni caminar. Los foros estaban a reventar. La gente viene a una fiesta. Además, se está vendiendo como nunca gran cantidad de libros. Este año se estimó que vinieron un millón 200 mil personas, misma cifra que en 2023, pero nunca había visto el Zócalo así.

Esto quiere decir que la gente está leyendo más y que ve esta feria como la fiesta del libro. No sólo vienen, sino que compran, escuchan música y tienen debates por todos lados. Verdaderamente, es una celebración del libro, reiteró.

La FIL contó con la participación de 327 editoriales y 269 actividades programadas del 11 al 20 de octubre. En ese lapso, se regalaron unos 10 mil ejemplares de siete títulos, informó la organizadora. El domingo obsequiaron Aníbal y Melquíades, de Francisco Hinojosa.

A las 19 horas de ayer se realizó una ceremonia de clausura con la presencia de Tomás Pliego Calvo, secretario de Atención y Participación Ciudadana de la Ciudad de México, y Raúl Basulto Luviano, titular de la Secretaría de Obras y Servicios local.

El domingo transcurrió bajo un cielo nublado y un ambiente frío, que millares de visitantes desafiaron para recorrer la plancha en busca de libros y de la experiencia cultural y formativa de las conferencias y presentaciones artísticas o conversaciones en torno a los textos.

En los accesos se veían bicicletas, carriolas, patines, adultos con café, niños con jugos, jóvenes con ejemplares, familias alegres, parejas de la mano, amigos que conversaban sobre algún libro comprado, todos bajo la bandera monumental agitada por el viento.

Saiz destacó que en el día final de esta feria se habló de Argentina y Brasil con Nicolás Arata, Juan Grabois, Federico Bonasso, Emerson Fernandes, Cristina Cavalcante y Matías Capeluto; además, se dio la conferencia Tiempo de mujeres, y se transmitió desde el Zócalo el programa Operación Mamut, de Fernando Rivera Calderón; también se realizó la charla Los falsificadores de la historia.

Mucho cómic, mucho son

La integrante de la Brigada para Leer en Libertad mencionó que hubo mucho cómic en el encuentro cultural, pues el 12 de octubre el foro Palestina Libre se dedicó a ese género, con la presencia del argentino Eduardo Risso y el español Pepe Gálvez. Hay muchos módulos dedicados al cómic, porque sabemos que a los jóvenes les gusta mucho.

A mediodía se realizó el concierto de los soneros Juma y Jony en el Foro Elvia Carrillo Puerto. Desde el escenario, el vocalista sostuvo que el Zócalo nos pide sabrosura y calidez. Estamos aquí y vamos a disfrutar, y continuó con su animosa presentación. A la par, en otro espacio se llevaba a cabo un recital para niños en el que una pequeña participó bajo el techo colorido que ondeaba al viento.

Una hora antes se presentó Triciclo Circus Band en el escenario musical principal. Sus admiradores recibieron ahí autógrafos de los integrantes de la agrupación. Los jóvenes se tomaron fotos o salían corriendo emocionados con la firma de los artistas.

En el Foro Felipe Carrillo Puerto, Francisco Hinojosa presentó su libro Aníbal y Melquiades, acompañado por Rafael Barajas El Fisgón. Ambos hablaron de su acceso a la literatura y a la narrativa ilustrada, y sus influencias.

Conforme avanzaba la tarde, pese a la amenaza creciente de la lluvia, se veía un Zócalo cada vez más lleno de entusiastas asistentes.