Sábado 19 de octubre de 2024, p. 11
La escuela primaria Centauro del Norte, ubicada en la alcaldía Iztapalapa, estuvo ayer de fiesta. Su director, el profesor Pedro Hernández, secretario general de la sección 9 del magisterio disidente de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), cumplió 40 años de servicio.
Hernández, fundador del plantel en 1992 y es responsable de ambos turnos, tuvo un homenaje a su trayectoria académica y por ello se llevaron a cabo bailables de alumnos y de profesores.
La hermana del dirigente, Mercedes Hernández, fue la encargada de dar lectura a su semblanza: “más allá de lo que implica soportar los desplantes autoritarios de funcionarios inexpertos y gobernadores autoritarios, lo más pesado de esas jornadas fue, además de descansar en la dureza del asfalto apenas amortiguada por cartones, hacerlo con el piso húmedo por las lluvias.
“Pedro nació el 25 de octubre de 1964, en la colonia Agrícola Oriental de la Ciudad de México, en el seno de una familia de nueve hermanos. Sus padres, de Tamasulapam del Progreso, en la mixteca oaxaqueña, emigraron a la capital. Su papá trabajaba en la maquila. Fabricaba abrigos y chamarras que llevaban etiquetas de prestigiosas tiendas departamentales.
“A los seis años Pedro se fue con sus tíos Marcelina y Bernabé a Tamasulapam. Vivió allí la infancia más feliz que pudo haber tenido. Aunque su tío era analfabeto, tenía una filosofía en la que formó a su sobrino. Con él aprendió a cuidar los animales, sembrar y cosechar. Nostálgico, a los 12 años pidió que lo regresaran a la ciudad. Quería ser ingeniero agrónomo, pero no pudo entrar a Chapingo, porque su familia no era campesina.
Se hizo normalista. Eran cuatro años de estudios después de la secundaria y se salía con plaza. En 1980, con 15 años, entró a la Benemérita Escuela Nacional de Maestros. Salió a los 19 años. Disfrutaba de una beca de apoyo para material didáctico
.
Tras la lectura, en el espacio que se destina para el descanso y esparcimiento de los estudiantes y los maestros realizaron bailes inspirados en la tradición oaxaqueña: Pinotepa, Flor de Piña, Fiesta Huasteca, Diablos y Tiliches, entre otros.
Al final del festejo, en entrevista el secretario general de la sección 9 manifestó: “40 años de servicio es una satisfacción. Iniciamos en 1984, el 1º de septiembre, egresado de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros. Salimos designados a una escuela aquí en Iztapalapa; además, me tocó estar en la sierra de Santa Catarina. Llegamos como jóvenes normalistas, a los 19 años de edad, prácticamente éramos unos niños con muchas ilusiones, fueron muchos propósitos que teníamos de unas una educación alternativa.
En 1992 se dio la oportunidad de fundar esta escuela y desde aquí plantear mucho de lo que hemos hecho en cuestión de una educación distinta. Llegar a 40 años de servicio siendo parte de la CNTE es muy satisfactorio porque hemos visto pasar muchas generaciones de niños y de jóvenes
, concluyó.