Ante los conflictos que se han generado en la Cámara de Diputados por la distribución de comisiones entre legisladores de Morena, la presidenta Claudia Sheinbaum descartó involucrarse en la vida interna de la fracción parlamentaria. No me voy a meter, es una responsabilidad de los legisladores, comentó durante su conferencia.

Sin embargo, sí les sugirió que deben regresar a sus comunidades a hacer trabajo en el territorio y abandonar el escritorio. Consideró que tienen una tarea fundamental de estar en sus demarcaciones. Es claro que también deben proponer y votar las leyes, pero fueron elegidos por el pueblo. Muchas veces llegan a ese lugar, al Congreso, a ese gran edificio, y ya no salen de ahí. Son representantes populares.

Por otro lado, tras conocerse que la actual presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Rosario Piedra Ibarra, anunció su pretensión de relegirse en el cargo, Sheinbaum enfatizó que esa es una decisión que corresponde al Senado. Creo que están por abrir la convocatoria y ellos tendrán que decidir. Rosario es, de alguna manera, un símbolo por ser hija de doña Rosario Ibarra de Piedra.

A pregunta expresa sobre la posibilidad de que se relija, fue cautelosa en no pronunciarse al respecto, pero expresó elogios a la trayectoria de su madre: es hija de doña Rosario Ibarra de Piedra, es en muchos sentidos un símbolo de la lucha de las madres de desaparecidos por razones políticas de aquella época, ¿no? Tiene todo nuestro reconocimiento y respeto, pero ya la decisión de quién va a ser la presidenta o el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, pues le corresponde al Senado.

Recordó que cuando cursaba el bachillerato en el Colegio de Ciencias y Humanidades Sur, sus primeras acciones políticas fueron para respaldar las huelgas de hambre que en los tiempos de José López Portillo realizaba Ibarra de Piedra, en demanda de la presentación de los desaparecidos políticos.