Aunque una gran parte de los trabajadores sindicalizados de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) buscan un cambio en la dirigencia sindical, el comité actual ha impedido la renovación valiéndose de diversas irregularidades en el proceso interno, denunciaron agremiados al Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (Suterm).

En entrevista con La Jornada, los denunciantes –quienes prefirieron no revelar su identidad por temor a la represalias– señalaron que la renovación es necesaria no sólo por la pérdida de derechos laborales, sino también porque la dirigencia actual (que fue relecta) apoyó la reforma energética de 2013 que impulsó el ex presidente Enrique Peña Nieto, misma que fraccionó a la CFE en pequeñas empresas.

El grupo de sindicalizados explicó que el pasado 18 de julio se realizó la eleccción para renovar el comité ejecutivo nacional del Suterm, proceso que se origina de la reforma laboral de 2019, la cual permite a los trabajadores elegir a las dirigencias sindicales por medio del voto libre secreto, personal y directo.

Destacaron que el actual comité, encabezado por Víctor Fuentes del Villar, quien ocupa el cargo desde 2005, no sólo adelantó la elección, sino que fue un proceso en el que se documentaron muchas inconsistencias.

Explicaron que cuando la Comisión Nacional Electoral del Suterm emitió la convocatoria para la elección el primer error fue hacerlo bajo los estatutos de 2019, los cuales ya no están vigentes, lo cual transgrede el Convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que faculta a las organizaciones obreras a redactar sus propios estatutos y escoger a sus dirigentes.

Lo hicieron apresurado, emiten en junio (la convocatoria) y el 18 de julio fueron las elecciones, dieron solamente 10 días para hacer proselitismo, señalaron, lo cual dificultó a todas las planillas que contendieron dar a conocer sus propuestas.

Los trabajadores acusaron que la dirigencia nacional utilizó a los secretarios seccionales para hacer campaña en cada una éstas, donde dieron regalos a los trabajadores y se entregó propaganda, sin especificar si los recursos utilizados provinieron del mismo sindicato o de la planilla.

Las otras dos planillas que se inscribieron en estas elecciones no tuvieron recursos. La empresa facilitó permisos con goce de salario para hacer proselitismo.

Resaltaron que también existe evidencia que se utilizaron vehículos oficiales de la CFE –durante las jornadas de trabajo– para colocar propaganda de la planilla oficialista, la planilla 1.

Explicaron que debido a que el Suterm también representa a sindicatos conexos, es decir, empleados del Instituto Nacional de Electricidad y Energías Limpias (INEEL), el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), así como personal de agua y drenaje en Monterrey, se emitió un oficio para que las casillas abrieran de 6 de la mañana a 5 de la tarde para no interrumpir la actividad productiva, pero para los trabajadores de agua y drenaje de la capital de Nuevo León cerraron a las 11 de la mañana. Las urnas se concentraron en un local sindical sin que estuviera una autoridad laboral para supervisar que ocurrió con ellas.

También denunciaron que el padrón, las casillas y los centros de votaciones cambiaron de un día para otro previo al 18 de julio de 2024. El mismo día los secretarios seccionales estuvieron presentes en los centros de votación, para de alguna manera condicionar el sufragio, mientras en el conteo se cayó el sistema.

La votación terminó siendo mayoría para la planilla que buscaba la relección, pero no logró la mayoría que se necesita al interior de nuestro sindicato: 50 más uno. Si se cuentan los votos efectivos que ellos tienen, consiguen 48 por ciento del padrón que tenía derecho a voto y todos los que no votan por ellos están por encima del 50 más uno, ese criterio se utiliza en las elecciones seccionales, pero no se utilizó en las nacionales, protestaron.

Al no obtener la mayoría bajo ese criterio, señalaron, se debió llamar a una segunda vuelta. Aunado a ello, pese a la inconformidades expresadas ante las autoridades laborales, la dirigencia de Fuentes del Villar indicó que durante el Congreso del Suterm que se realizará del 12 al 14 de noviembre, se tome nota al comité relecto.

Uno de los integrantes de las planillas que buscaron la renovación de comité ejecutivo nacional del Suterm explicó que buscaron participar porque los trabajadores enfrentan falta de representación ante la empresa y se perdieron cláusulas del contrato colectivo con la reforma energética de 2013.

Durante el periodo neoliberal no solamente se ha afectado a la empresa, sino también a su fuerza laboral en muchos sentidos, no sólo en las cuestiones contractuales, como pérdida de jubilaciones o pérdidas de cláusulas, sino que también estaban dejando que se hiciera chatarra la empresa y las herramientas con las que trabajamos.

El grupo de trabajadores apuntó que Fuentes del Villar no se opuso a la reforma energética impulsada en la administración de Peña Nieto, sino que la apoyó al no llamar a los trabajadores al diálogo en el Congreso de la Unión.

Comentaron que con la creación de cuentas individuales para la jubilación, disfrazadas de Afore, han tenido problemas, pues han habido errores en las transferencias de fondos y a pesar de que el dirigente nacional, ahora relecto, lo sabía no hizo nada. Sólo hasta en 2023 se hicieron algunas correcciones, pero no se resolvió el problema.