Nueva York. El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, afirmó ayer que la pesadilla en Gaza está entrando en un segundo año atroz y abominable. Este fue un año de crisis humanitaria, política, diplomática... y hasta moral; asimismo, abogó por la solución de dos estados en el conflicto entre Israel y Palestina.

Funcionarios del organismo mundial expresaron su preocupación por el hecho de que Israel use en Líbano los mismos métodos de guerra que en Gaza y pidieron actuar para evitar la misma espiral de perdición.

Josep Borrell, canciller de la Unión Europea, puso en duda que la ofensiva en Líbano pueda aumentar la seguridad de Israel, al destacar que no hay soluciones militares a conflictos profundamente enraizados.

Guterres aseguró que cada ataque aéreo, cada misil lanzado, cada proyectil disparado, empuja la paz más lejos del alcance. Insistió en demandar un alto el fuego en Gaza y Líbano, la inmediata e incondicional liberación de rehenes en manos de Hamas y la ayuda humanitaria para todos aquellos que la necesitan. Tampoco nos rendiremos en nuestro llamado a una acción irreversible hacia la solución de dos estados; toda la gente en Medio Oriente merece vivir en paz, añadió.

En declaraciones a la prensa, Guterres externó preocupación por una iniciativa israelí para impedir que la agencia de la ONU para los refugiados en Palestina (Unrwa) continúe su trabajo humanitario.

Guterres aseveró que aprobar dicho proyecto llevaría a una catástrofe en medio de lo que ya es un desastre, y constituiría una violación de las obligaciones de Israel al derecho internacional.

En este contexto, Países Bajos estudia una solicitud para abrir un caso penal contra funcionarios israelíes de inteligencia por presunta interferencia en una investigación de la Corte Penal Internacional (CPI) sobre posibles crímenes en los territorios palestinos ocupados.

Los denunciantes se apoyan en una investigación del periódico The Guardian, según la cual Tel Aviv habría intentado socavar, influenciar e intimidar a la oficina del fiscal jefe de la CPI durante nueve años.

En tanto, la ONU confirmó que Israel retiró sus tropas y equipo militar desplegado cerca de un puesto de vigilancia irlandés de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano. El ejército de Irlanda informó en X que todo el personal en Líbano se encuentra bien y en buen estado.

El Pentágono anunció que el ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, canceló su viaje a Wa-shington para reunirse con su par estadunidense, Lloyd Austin, sin explicar por qué.