Durante la última década, los impuestos relacionados con el entorno natural han tomado un lugar central en la política tributaria para incentivar la transición hacia la sostenibilidad ambiental y ser una fuente importante de ingresos, destacó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

En su documento Reformas de la política tributaria 2024: OCDE y economías asociadas seleccionadas, el organismo señaló que los impuestos relacionados con el medio ambiente se aplican a bases impositivas que se consideran de especial interés.

Abarcan gravámenes que probablemente tengan un fuerte impacto ambiental, incluidos los impuestos sobre los agroquímicos, la energía, el uso de carreteras, los vehículos, los residuos, la extracción de agua y la contaminación del agua, mencionó en el análisis.

Los sistemas de tributación ambiental vigentes y bien diseñados pueden, por tanto, influir en el impacto ambiental, alentando a las empresas y los hogares a considerar los costos ambientales de sus comportamientos, agregó.

Reino Unido, Hungría y Países Bajos intensificaron el cobro de impuestos cuando se trata de emisiones de carbono.

En Reino Unido se incluirá a aquellas del sector marítimo nacional a partir de 2026, así como las provenientes de instalaciones de incineración de desechos a partir de 2028. Hungría, por su parte, introdujo un nuevo impuesto de cuota de dióxido de carbono y en Países Bajos se amplió el catálogo de emisiones contaminantes que pagan impuestos.

La OCDE detalló que el primero de octubre de 2023, el Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (CBAM) de la Unión Europea inició su fase de implementación transitoria. El CBAM se aplicará inicialmente a las importaciones de determinados bienes e insumos seleccionados, cuya producción es intensiva en carbono y corre un alto riesgo de fuga.

Por su parte, Grecia ha emitido un primer conjunto de normas que establecen las costumbres y requisitos para la importación de bienes cubiertos por el CBAM procedentes de países no pertenecientes a la Unión Europea.

Múltiples requerimientos

La OCDE expuso algunas de las razones por las que los países requieren hacer reformas fiscales, entre ellas, la deuda pública, el envejecimiento de la población, el aumento de los costos de mitigación del cambio climático y nuevas prioridades del gasto. A su vez, las altas tasas de inflación y los salarios insuficientes en algunos hogares. El organismo comentó que en 2023, los países buscaron aliviar la carga fiscal sobre productos considerados de primera necesidad.

Reino Unido eliminó el impuesto al valor agregado (IVA) en medicamentos recetados bajo regímenes de prescripción novedosos y España lo bajó de 10 a 4 por ciento en productos de higiene, preservativos y otros anticonceptivos no medicinales.

El informe de la OCDE destaca las tendencias recientes en la política fiscal del país de 90 jurisdicciones miembros.