Washington. El crecimiento económico de Estados Unidos se aceleró en el segundo trimestre gracias a la fortaleza del gasto de los consumidores, confirmó este jueves el gobierno.

El producto interno bruto (PIB) de la mayor economía mundial aumentó a una tasa anual de 3 por ciento el pasado trimestre, informó ayer la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio en su tercera y última revisión del PIB correspondiente al segundo periodo del año. Economistas encuestados por Reuters preveían que el PIB se mantendría en 3 por ciento, como se había informado previamente. En tanto, el crecimiento del primer trimestre se revisó al alza, hasta 1.6 por ciento, desde 1.4 por ciento anunciado anteriormente.

El gobierno revisó los datos de las cuentas nacionales desde el primer trimestre de 2019 hasta el primer trimestre de 2024. Las revisiones mostraron que el crecimiento económico y las ganancias empresariales fueron más fuertes en 2023 de lo estimado previamente.

El crecimiento del PIB de 2019 fue revisado al alza a 2.6 por ciento; en 2020 –el año marcado por la pandemia de covid-19– se registró una contracción de 2.2 por ciento; en 2021 el rebote llevó a una expansión de 6.1 por ciento; en 2022 el dato fue de 2.5 por ciento de crecimiento y el año pasado de 2.9 por ciento, todos los años, excepto en 2020, los datos fueron revisados al alza.

La primera estimación de crecimiento del PIB en el tercer trimestre de 2024 será publicada el 30 de octubre, pocos días antes de la elección del 5 de noviembre. La economía es una de las principales preocupaciones de los estadunidenses.

Caen solicitudes de ayuda por desempleo

El número de estadunidenses que solicitaron ayuda económica por desempleo la semana terminada el 21 de septiembre cayó en 4 mil para un total de 218 mil, su nivel más bajo desde mediados de mayo y menos que los 224 mil que los analistas esperaban, informó el Departamento del Trabajo.

La cifra de solicitudes de ayuda por desempleo es considerada un reflejo de los despidos en Estados Unidos y han estado disminuyendo, luego de un incremento modesto registrado a inicios de la primavera.

Aunque el mercado laboral ha perdido impulso debido al descenso de las ofertas de empleo y de las contrataciones, los despidos se han mantenido bajos y no hay señales de deterioro.

Las solicitudes se han mantenido en su mayoría estancadas desde que cayeron desde un máximo de 11 meses de 250 mil a fines de julio, tras los cierres temporales de plantas en la industria automotriz.