¿La competencia en ascenso?
oy comienza el festival de habla hispana más importante del mundo. Con sus múltiples secciones y concursos, el de San Sebastián trata de compensar su desafortunado turno de la temporada otoñal, justo después de Locarno, Venecia y Toronto. He repetido hasta el cansancio que su competencia oficial suele ser débil, pero en esta ocasión parece desmentir mi prejuicio con una selección a primera vista atractiva.
Así, dicha competencia ha reunido a autores conocidos como el británico Mike Leigh ( Hard Truths), el franco-griego Costa-Gavras ( Le dernier souffle), el alemán Edward Berger ( Cónclave), quien obtuvo varios premios Oscar con su versión de Sin novedad en el frente, el argentino Diego Lerman, que compite por tercera ocasión con El hombre que amaba los platos voladores, el desigual francés François Ozon ( Quande vient l’automne), la documentalista chilena Maite Alberdi, quien debuta en la ficción con El lugar de la otra, mientras que el japonés Kiyoshi Kurosawa –sin parentesco con Akira– presenta un remake francés de su anterior Hebi no michi.
De Estados Unidos concursan el otrora documentalista Joshua Oppenheimer ( The End) y Gia Coppola ( The Last Showgirl), nieta del patriarca Francis Ford. Mientras que del país anfitrión compiten Iciar Bollaín ( Soy Nevenka), Pedro Martín-Calero ( El llanto), Pilar Palomero ( Los destellos) y el iconoclasta Albert Serra ( Tardes de soledad). Finalmente, hay dos debutantes, el chino Xin Huo ( Bound in Heaven) y la portuguesa Laura Carreira ( On Falling).
Por otra parte, el cine mexicano estará representado únicamente por la película Sujo, de Fernanda Valadez y Astrid Rondero, que compite en la sección Horizontes Latinos. En cambio, no acabo de contar la cantidad de títulos argentinos que participan en las diferentes secciones. Incluso va a haber un acto de protesta organizado por el propio festival en contra de las medidas draconianas impuestas a la cultura argentina por el gobierno del presidente Milei.
En cuanto a los premios honoríficos son tres Premios Donostia los que se otorgarán en estos días. El primero, a entregarse hoy en la ceremonia de inauguración, se debía desde el año pasado al actor Javier Bardem, quien no pudo asistir debido a la extendida huelga de actores. Los otros dos son para la actriz australiana Cate Blanchett y el director manchego Pedro Almodóvar, el recién triunfador de Venecia con su película La habitación de al lado, a proyectarse aquí hacia el final del festival.
Esta vez las películas que integran la popular sección Perlak provienen casi todas de la competencia de Cannes. Si leyeron mis artículos de entonces, recordarán que muy pocas me resultaron satisfactorias. Entonces dedicaré mi tiempo de visionados, como dicen aquí, a agotar la sección oficial.
Por lo pronto, veré con interés la película inaugural, Emmanuelle, de Audrey Diwan. En efecto, se trata del mismo personaje que encarnó la actriz neerlandesa Sylvia Kristel en la serie de películas eróticas que fueron el furor en los años 70, aunque previsiblemente el tratamiento será muy diferente, bajo una óptica feminista.
X: @walyder