Lerdo, Dgo., Ejidatarios de Villa Juárez, municipio de Lerdo, aseguraron que no solamente enfrentan la devastación de sus tierras, sino la pérdida de sus medios de subsistencia a consecuencia de la operación de la planta termoeléctrica Guadalupe Victoria, de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Este poblado de la Comarca Lagunera, que dependía históricamente de la producción agrícola, en dos décadas que lleva funcionando la central, vio cómo su modo de vida se desmoronó al quedarse sin tierras cultivables y la imposibilidad de seguir sembrando, expusieron.

Ante esta situación, agregaron en rueda de prensa que muchas familias recurrieron a trabajos informales, como la venta de alimentos o incluso migraron en busca de mejores oportunidades de vida.

La CFE incumplió acuerdos, afirman

Este problema se agravó debido que la CFE no cumplió lo que había prometido a los labriegos: que 76 habitantes de Villa de Juárez serían contratados en la planta, pero sólo 12 obtuvieron empleo.

Nos dijeron que habría trabajo para nuestra gente, pero apenas una mínima fracción fue contratada, ¿dónde quedó la promesa?”, reprocharon los campesinos por medio de su representante legal, Arturo López.

Los inconformes exigieron al gobierno federal su intervención para garantizar una indemnización justa y soluciones reales para las familias que han sido desplazadas de sus tierras.

Con los predios revalorizados como zona industrial, el impacto económico para la localidad es incalculable. Los labriegos insisten en que, más allá del dinero, lo que se perdió fue su sustento y la posibilidad de continuar con su forma de vida.

Los ejidatarios de Villa Juárez demandaron a la CFE frenar las obras de ampliación de la termoeléctrica Guadalupe Victoria por los graves daños que, aseguran, causa al medio ambiente.

Les exigieron a convocar a una mesa de diálogo a más tardar en una semana, pues de lo contrario, advirtieron, darán la batalla por dos vías: la movilización social, con la toma de las instalaciones, y la jurídica, mediante amparos.