La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) está nuevamente en riesgo de parar operaciones en la Ciudad de México y cambiar de sede, ante la inconformidad de algunos vecinos de la colonia Granjas San Antonio, en la alcaldía Iztapalapa, que por desinformación y azuzados por intereses políticos presionan para que deje el edificio donde labora desde el 5 de agosto pasado.

Vecinos y fuentes oficiales consultadas por La Jornada aseguraron que desde hace algunas semanas han aumentado los mensajes de rechazo, primero de manera interna y ahora públicamente, a través de lonas que han colocado en la calle expresando su molestia: ¡Fuera de aquí!, ¡no a la Comar! y los vecinos exigimos su reubicación inmediata.

Gustavo Alanís, quien lleva más de 35 años viviendo en la colonia, denunció que particularmente hay un grupo de habitantes que está encabezado por Arturo Castell, quien busca pasar como representante de la Comisión de Vecinos de Granjas San Antonio, la cual no existe, y ha difundido temor diciendo que con la Comar se instalarán campamentos de migrantes y aumentará la inseguridad.

En un escrito difundido entre los colonos por ese grupo para recabar firmas contra la Comar, cuya copia tiene este diario, manifiestan que el riesgo de afectación a la comunidad es grave, según la experiencia en otras zonas de la ciudad, como la colonia Juárez, donde el órgano encargado de la política de refugio operó hasta el 25 de mayo pasado, al verse obligado a cambiar de domicilio por presiones de vecinos.

Señalan que en Granjas San Antonio ya tenemos suficientes temas de inseguridad como para aceptar que se incrementen en un artero atentado contra nuestra tranquilidad y estilo de vida.

Asimismo, apuntan un posible deterioro de la zona, ya que la llegada masiva de migrantes y su eventual estadía perjudicará el buen estado y conservación de nuestra infraestructura vial, parques y zonas comunales, la cual nos ha constado mucho para que se mantenga en buen estado.

Incluso consideran que impactará en el valor de sus casas, porque nadie quiere vivir o rentar en una colonia donde no hay garantías para el libre tránsito y niveles de inseguridad elevados, por lo que nuestro patrimonio está en riesgo.

Alanís sostuvo que a las asambleas vecinales se han presentado además personajes que no viven en la colonia como personeros del concejal panista de Iztapalapa, Guillermo Mora, para supuestamente conocer nuestras necesidades y mediar con las autoridades.

▲ Desde el 5 de agosto pasado, la comisión para refugiados tiene su sede en la colonia Granjas San Antonio.Foto Germán Canseco

No obstante, aseguró que la mayoría de los colonos está a favor de la permanencia de la Comar en Granjas San Antonio, principalmente quienes tienen negocios como tiendas, fondas de comida, papelerías y otro tipo de mercancías. Hay una derrama económica.

Componente xenofóbico

Por su parte, un funcionario que prefirió omitir su nombre señaló que en las manifestaciones vecinales en el fondo hay un miedo a la comisión y a la población migrante que, si bien es comprensible, no es justificable. Las adjetivaciones tienen más un componente xenofóbico, ya que dicen que los migrantes van a llegar con enfermedades y van a ensuciar.

Sobre la presencia de otros grupos políticos, indicó que a las asambleas se han presentado personas que no tienen nada que ver y uno de los líderes ha estado vinculado con el PRD. Nos dicen algunos vecinos que incluso forman parte de un grupo de choque que utiliza amenazas y amedrenta.

Señaló que desde la Comar se ha intentado resolver el problema de incomunicación y se han logrado acuerdos entre los gobiernos federal y capitalino, así como con la alcaldía y la sociedad civil, pero aún así persiste la negativa de los vecinos.

Afirmó que tanto el gobierno de la ciudad como la alcaldía se encargarán de la seguridad, que haya patrullas y alguna carpa de policía para que esté vigilando, no solamente para el vecindario, sino que asegure que no haya ninguna persona migrante que quiera acampar. Además, dijo, habrá más luminarias en la zona y se mantendrá el espacio limpio.

Las fuentes explicaron que muchas personas creen que los campamentos de migrantes se han conformado por culpa de la Comar, porque están esperando una solicitud de refugio con nosotros y eso es falso, pues la gran mayoría está varado debido a que espera una cita para pedir asilo en Estados Unidos.

La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados ya suspendió dos meses sus actividades, del 25 de mayo al 2 de agosto, tras el fallido cambio de domicilio de la colonia Juárez a la Vernónica Anzures, igualmente por presiones, en este caso de personas organizadas por el alcalde en Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe.