Chihuahua, Chih., La toma alta de la presa La Boquilla, localizada en el municipio de San Francisco de Conchos, fue cerrada ayer al ubicarse el embalse en niveles mínimos no vistos desde 1995, y quedó abierta únicamente la toma baja, con un gasto de 22 metros cúbicos por segundo.

Mariano Jáquez Gandarilla, presidente de la sociedad de riego agrícola Unidad Conchos, indicó que se continuará la irrigación de cultivos en la zona hasta el 30 de septiembre.

El cierre fue forzado por la inconformidad que habitantes de San Francisco de Conchos presentaron ante la Comisión Nacional Agua (Conagua) en cuanto a suspender el riego de sembradíos, ya que el bajo nivel del embalse amenaza la disponibilidad de líquido para consumo humano.

El secretario de Gobierno estatal, Santiago de la Peña Grajeda, convocó a una reunión en la capital del estado, a la cual acudieron representantes de dicho distrito, funcionarios de la Conagua y pobladores de San Francisco de Conchos, quienes negociaron el uso del agua de La Boquilla, que ayer se encontraba en 16 por ciento de su capacidad.

Centenares de ciudadanos, incluido el alcalde Jaime Ramírez Carrasco, exigieron cerrar las compuertas de la presa antes de que su nivel llegue a 12 por ciento, pues la Conagua autorizó la extracción para utilizar líquido en regiones agrícolas sin tomar en cuenta la salud del ecosistema del embalse, el uso doméstico ni las actividades de pescadores y prestadores de servicios turísticos.

Jáquez Gandarilla aseguró que el plan de irrigación no representa peligro para La Boquilla y los agricultores necesitan continuar la extracción para completar el ciclo de siembra ante la falta de lluvias.