Buenos Aires., El presidente Javier Milei, de la ultraderechista La Libertad Avanza (LLA), continúa viajando a distintos lugares por temas partidarios, mientras la situación social se agrava cada día, y de acuerdo con la consultora Zuban, 92 por ciento de argentinos consideran que lo más grave en el país es el aumento de la pobreza, y en segundo plano, con 89.9 por ciento, el incremento en la desocupación.

Diversos analistas estiman que en centros de estudios sobre las políticas gubernamentales es más que preocupante la pérdida continua de soberanía debido a los acuerdos firmados por fuera del Congreso, ocultados por los medios de comunicación masivos, que cada día manipulan más la información que llega a las mayorías.

El Observatorio de la Deuda Social Argentina, de la Universidad Católica (UCA), certificó índices de pobreza de 54.9 por ciento de la población y 20.3 por ciento de indigencia.

La Central de Trabajadores de Argentina detalló que la pobreza afecta a 56 por ciento; 62 por ciento en el conurbano y en algunas provincias a 70 por ciento. La indigencia en el conurbano alcanza a 25 por ciento de la población, asevera la central sindical.

Observamos, al igual en gran parte de la sociedad, una vulneración preocupante de los derechos de niños, niñas y adolescentes en nuestro país, señaló la UCA al advertir que 51.4 por ciento de los menores de 14 años son pobres en Argentina.

Este domingo, Día del Niño, el Observatorio de la Infancia y la Adolescencia de la Sociedad Argentina de Pediatría aseveró que “a partir de hechos muy graves se estuvo hablando mucho de inseguridad alimentaria en la niñez ahora en que han surgido estas alarmantes cifras (…) ningún índice mejora, sino que además se vienen profundizando para mal todos los indicadores”.

Se estima que esto es consecuencia directa de la destrucción del salario, de las jubilaciones, de la desvalorización de los planes sociales y también es lo que prueba por qué crecen en Argentina la pobreza y la indigencia. Otro dato importante es el aumento de familias enteras durmiendo en las calles con el invierno austral más frío de los últimos años, y algo que ya parecía que nunca más se vería en este país es la cantidad de personas que buscan comida en la basura.

Se añade la permanencia de los discursos de odio que no cesan y la preparación de una política de seguridad que, montada desde afuera, permitirá una verdadera invasión de espías extranjeros, a través de las nuevas tecnologías, lo que evidentemente queda en manos de los inevitables asesores tanto de Estados Unidos como de Israel.

En tanto, los últimos registros muestran una serie de situaciones difíciles dentro de la gobernante LLA; hay peleas internas, incluso en diputados y también el evidente intento de Milei y su inquietante hermana Karina, la jefa, como le dice el presidente, de desplazar a la vicepresidenta, Victoria Villarruel.

Más allá de estas situaciones, Milei se muestra como el gran triunfador.

El gobierno festejó con gran jolgorio la inflación de 4 por ciento en julio; el cierre de 10 mil pymes en siete meses implica que 250 mil puestos de trabajo se pierden, con salarios y jubilaciones entre los más bajos de América Latina, escribe el periodista Luis Bruchstein en su columna de Página/12.

Sostiene que un cuatro de inflación mensual general es altísimo con semejante recesión, y añade que los medios corporativos celebraron que sea la inflación más baja en 30 meses, pero a costa de destruir la economía con la recesión más baja en 30 años. Peor que la de 2001 y que las de la pandemia.

También alude a la utilización mediática de las denuncias de Fabiola Yáñez contra el ex presidente Alberto Fernández, lo que encubre la tragedia que vive la población argentina. Por cierto, un nuevo ataque contra la prensa de Milei alcanzó a propios y ajenos.