Grandes fondos documentales de los llamados archivos de la represión de la Sedena y del disuelto Estado Mayor Presidencial, con información vital para el esclarecimiento de las conductas de quienes perpetraron crímenes de lesa humanidad en el pasado, nunca llegaron a transferirse al Archivo General de la Nación (AGN), según ordenaban un decreto del presidente Andrés Manuel López Obrador y la nueva Ley General de Archivos de 2018.

Por el contrario, antes del inicio del actual sexenio, decenas de miles de documentos fueron extraídos por personal del Centro Nacional de Inteligencia (CNI, antiguo Cisen), denunció ayer el comisionado Carlos Pérez Ricart, en la presentación del informe final del Mecanismo de Esclarecimiento Histórico (MEH) de la Comisión para la Verdad.

Entregan informe final

Pérez Ricart fue el encargado de dar a conocer el quinto volumen titulado ¿Porqué sigue ocurriendo: factores de persistencia de la violencia estatal tras 1990, con más de 400 páginas. En el capítulo titulado Las formas del silencio se aborda detalladamente el ocultamiento y escamoteo de documentación requerida, tanto de los fondos de las direcciones Federal de Seguridad y General de Investigación Política y Social, que deberían estar en el AGN y en los diversos archivos castrenses.

Contrario a lo que se sostiene oficialmente, de que el acceso de los investigadores del MEH a los documentos militares fue total, ya que en 2018 se eliminó la figura de archivo histórico confidencial, testimonios y reportes del personal que laboró en el área de consultas de fondos documentales constataron cómo el extinto Cisen purgó y sacó documentos de AGN, expresó Pérez Ricart. Esgrimiendo una copia del informe, dijo: “aquí está la evidencia del saqueo a la nación y al pueblo de México. Es falso que se hayan dado los archivos de inteligencia, contra lo que aseguró el Presidente".

Y la apertura real de esta información, señaló, ha sido una exigencia constante de los colectivos de víctimas con los que han trabajado estos años. Que la exigencia de que el Cisen entregue todos los archivos requeridos el gobierno la asuma como exigencia de las víctimas.

Añadió que los investigadores de los distintos equipos del MEH asignados a trabajar en los archivos de la Sedena entre julio de 2022 y octubre de 2023 “fueron maltratados al punto que no pudimos continuar… fuimos una comisión presidencial sin el apoyo de la Presidencia”.

En Las formas del silencio se indica que la restricción al acceso de archivos relacionados a los hechos estudiados en el presente Informe no contribuye a la construcción de una transición política ni de un gobierno democrático. Esto sólo abona a repetir las prácticas de los regímenes autoritarios mediante obstáculos al acceso a la información que sólo perpetúan la impunidad. Del mismo modo, se obstaculiza la construcción de una historia comprometida con la verdad y la justicia.

Hasta abril de 2024, el CNI sólo había hecho dos transferencias al AGN. La primera consistió en 10 legajos (816 fojas en total) y alguna fotografías. La segunda incluyó seis expedientes. No hubo mas.

Durante el tiempo que el Mecanismo para el Esclarecimiento Histórico pudo ingresar a esos archivos militares, se solicitó la consulta de diversos documentos. Siempre se respondió con negativas.

Por ejemplo, se les negó información sobre agregados y comisionados militares en el extranjero, de especial interés para el presente informe, ya que varias de las estrategias de contrainsurgencia ejecutadas por el Estado mexicano contaron con la colaboración de gobiernos extranjeros. La petición fue rechazada porque dañaría las relaciones de amistad con los países involucrados.

Se detallan también casos en los que expedientes localizados fueron entregados con versiones en las que de manera previa y deliberada se habían extraído fojas que contenían información.

Ponen de ejemplo las actividades de seguimiento (espionaje) al Comité ¡Eureka! y a la Coalición Obrera, Campesina, Estudiantil del Istmo (Cocei) de Oaxaca, donde entregaron carpetas de las que habían sustraído fojas y la sustituyeron con recortes de prensa.