En el primer semestre de 2024 el valor de las importaciones de mercancías de China a México ascendió a 61 mil millones de dólares, la cifra más alta desde que existen registros, revelan datos oficiales.

La suma acumulada de los primeros seis meses del año, según información del Banco de México (BdeM), es 11.9 por ciento mayor en comparación con los 54 mil 503 millones de dólares reportados en el mismo lapso de 2023.

Las mayores compras de México a China se dan en un contexto en el que las autoridades hacendarias han remarcado el fuerte déficit comercial que existe con el gigante asiático, en el que las importaciones superan en más de 10 veces las exportaciones.

A finales de julio pasado en un evento en San Luis Potosí, Rogelio Ramirez de la O, secretario de Hacienda, señaló que México tiene que revisar su relación comercial con China, porque nos vende y no nos compra, y eso no es comercio justo.

Muestra de esta diferencia es que en los primeros seis meses de 2024 México exportó a China mercancías por un valor de 4 mil 855 millones de dólares, es decir, apenas 8 por ciento de los 61 mil millones de dólares que se importaron desde el gigante asiático.

Además, de acuerdo con datos del BdeM, mientras las importaciones desde China aumentaron 11.9 por ciento en la primera mitad del año, las exportaciones a ese país presentaron una disminución anual de 9.3 por ciento, dado que en el mismo periodo del año pasado se ubicaron en 5 mil 355 millones de dólares.

De acuerdo con información del banco central, China es el segundo socio comercial de México sólo por detrás de Estados Unidos.

El comercio total con Estados Unidos durante el primer semestre de 2023; es decir, la suma de importaciones más exportaciones, según el BdeM, fue de 373 mil 843 millones de dólares, mientras con China se ubicó en 68 mil 858 millones de dólares.

Mientras las exportaciones de China a México avanzan de forma acelerada, el gobierno estadunidense, que enfrenta una guerra comercial con la nación asiática, ha hecho señalamientos al gobierno mexicano sobre una posible estrategia china para usar a nuestro país para colocar su mercancía en territorio estadunidense sin pagar aranceles.

A principios de año, Katherine Tai, representante comercial de Estados Unidos, amagó con imponer aranceles a México acusando una triangulación comercial de metales chinos, los cuales, señaló, primero pasan por territorio mexicano y luego van a EU, evadiendo los impuestos correspondientes.

Posteriormente, en julio pasado, México acordó con Estados Unidos imponer aranceles de 25 por ciento al acero y de 10 por ciento al aluminio que vayan a territorio estadunidense a través del mexicano, pero que no hayan sido fundidos y vertidos en México, EU o Canadá.

Desde entonces, nuestro país ha puesto en práctica otras medidas contra china; por ejemplo, indagaciones en las importaciones de calzado, caucho, o aranceles a varillas provenientes de esa nación, mientras por el lado estadunidense han advertido sobre cuotas a automóviles chinos que se fabriquen en México, o bien, endurecer la política comercial por medio del T-MEC, tratado comercial que se revisará el próximo año.