Miércoles 7 de agosto de 2024, p. 27
Jerusalén. Israel llevó a cabo una política sistemática de malos tratos y tortura a prisioneros desde el comienzo de la guerra en Gaza, al someter a los detenidos palestinos a actos que van de la violencia arbitraria a los abusos sexuales, acusó la organización israelí de derechos humanos B’Tselem.
En un informe publicado días después de que el ejército israelí detuvo a nueve soldados acusados de maltratar a un prisionero en una instalación militar del desierto del Néguev, la prensa israelí informó de que se les acusaba de abusar sexualmente de un miembro de una unidad de élite de Hamas.
B’Tselem detalló palizas, trato degradante, privación de sueño y el uso reiterado de violencia sexual en diversos grados de gravedad
.
Un portavoz del servicio penitenciario afirmó que, desde el ataque del 7 de octubre, el ultraderechista ministro de Seguridad, Itamar Ben-Gvir, ordenó endurecer las condiciones de reclusión.
En tanto, el ejército israelí informó que en las últimas 24 horas eliminó a 45 combatientes
de Hamas, al tiempo que confirmó, tras una investigación exhaustiva
, la muerte de la última persona que seguía desaparecida en Israel tras los ataques del 7 de octubre.
Mientras, las autoridades palestinas ubicaron en 12 los fallecidos ayer en tres operaciones israelíes en Cisjordania reocupada.
Asimismo, el saldo de víctimas mortales desde el inicio de la embestida israelí en la franja de Gaza se elevó a 39 mil 653, y el de heridos o mutilados llegó a 91 mil 535.
Por otra parte, manifestantes ultraortodoxos irrumpieron en la base de Tel Hashomer del ejército, en rechazo a que los incorporen a las filas de combate en Gaza.
Históricamente, los ultraortodoxos estaban exentos del servicio militar obligatorio en Israel si se dedicaban al estudio de los textos sagrados del judaísmo, regla instaurada por David Ben Gurión, fundador del Estado de Israel, en 1948. Pero en junio la Corte Suprema ordenó su conscripción.