Los casos de dengue en las Américas se han incrementado en las últimas décadas, y actualmente estamos viendo un número de casos sin precedente, expuso Gamaliel Gutiérrez, oficial técnico de vigilancia de enfermedades arbovirales de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), quien detalló que esta enfermedad transmitida por un vector presenta una tendencia hacia el aumento por cada 10 años, pues cada década supera con el doble de casos a la previa.

En el webinario Crisis sanitaria por dengue en Latinoamérica y el Caribe, organizado por Aids Healthcare Foundation y el Instituto Nacional de Salud Publica, entre otras instituciones, el médico epidemiólogo detalló que en 2023 hubo casi 4.7 millones de casos de padecimiento transmitido por el mosquito Aedes aegypti, y en lo que va de este año llevamos casi 11 millones de casos reportados (10.8 millones), y en estos cuatro años de la década actual, ya hemos superado todos los reportados en la previa.

Entre 2021 y 2024 se han registrado 19.5 millones de contagios; en la década anterior, 18.2; entre 2000 y 2009, 7.8 y en los 90, 3.1 millones.

El experto en epidemiología del dengue indicó que a pesar del aumento de casos en el continente, se ha logrado reducir el número de casos graves, también se nota una tendencia a la disminución de la letalidad por dengue.

Previo a 2010, “la tendencia de gravedad y letalidad era al aumento, y posterior a ese año se ha reducido; esto está muy vinculado a mejoras en el manejo del padecimiento: clasificación clínica de la enfermedad, identificación de signos de alarma que facilita la prevención a formas graves, y por lo tanto a muertes. Estimaciones refieren que desde 2011 hasta la fecha se han prevenido 7 mil 735 muertes por dengue en la región. Actualmente, la letalidad regional es de 0.054 por ciento.

De igual forma, se han modificado los serotipos dominantes de dengue. Antes, el predominio era de los tipos uno y dos, “ahora estamos viendo cómo el tres y cuatro también se han distribuido ampliamente.

Entre los factores que propician el avance de la enfermedad están los cinturones de pobreza en las megaciudades, agua insegura, deficiencia en los desechos líquidos y sólidos, pues son los criaderos principales del vector, lo cual dificulta el control y la prevención.

También hay determinantes ambientales, como los periodos calurosos y más prologados en áreas donde la temperatura había sido un factor de protección, y ahora ya no lo es. Ello ha derivado que en países como Argentina y Uruguay se esté reportando dengue. En Chile, aunque no hay casos, “se reporta la presencia de Aedes aegypti.”

Además, llama la atención la presencia de Oropuche, clasificada como una arbovirosis emergente, en Brasil, Perú, Bolivia y Colombia, y en Cuba, donde no se había reportado, también hay casos, por lo cual se investiga una posible transmisión vertical y fallecimientos por esta enfermedad.