A escala global cada tres minutos nace un bebé con labio y paladar hendido (LPH), señaló Alejandro González, director de programas de Smile Train México, quien explicó que esta condición se caracteriza por una fisura en el labio y/o el paladar.

En el encuentro Sonrisas que inspiran, realizado en vísperas del Día Nacional de Labio y Paladar Hendido, precisó que esta situación se presenta en uno de cada 700 nacidos vivos, por lo que es un importante problema de salud pública.

Subrayó que es mucho más que un problema estético que se resuelve sólo con cirugías, pues altera funciones alimentarias y respiratorias; además, genera afectaciones sicológicas en los infantes y adolescentes. Por ello, la atención debe ser multidisciplinaria porque un paciente con LPH no sólo va a requerir la cirugía. La clave que va a permitir poder llevar a cabo la integración del paciente a la sociedad, es la atención que debe ser acompañada por otras disciplinas como odontología, ortodoncia, sicología, foniatría y terapia de lenguaje.

El LPH se origina por la falta de la formación y fusión de ciertas estructuras que conforman el labio y paladar. Agregó que en pláticas que ha tenido con madres y padres, ellos se preguntan qué hice mal, en qué me equivoqué, y empieza el sentimiento de culpa, pero es algo multifactorial.

Las causas del padecimiento son múltiples, entre ellas la predisposición genética y las exposiciones al tabaco, el alcohol, las drogas, insecticidas y algunos medicamentos. Asimismo, puede incidir la ocurrencia de enfermedades durante el periodo de gestación y la desnutrición de la madre durante el embarazo, por ejemplo falta de ácido fólico. El especialista, precisó que Smile Train es un agrupación global que está presente en más de 95 países y ha gestionado más de 2 millones de cirugías.