Blanca Lilia Ibarra, ex presidenta del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), consideró necesario llevar a cabo un parlamento abierto antes de definir el futuro de ese organismo, en el que participen autoridades, legisladores, expertos y la ciudadanía.

Opinó que antes de desaparecer al INAI y los demás órganos autónomos, como lo propone el presidente Andrés Manuel López Obrador, se requiere de esos foros de discusión en torno a la importancia del trabajo que durante 22 años ha realizado el instituto de transparencia.

Entrevistada tras la presentación del libro Lead in Life, de la presidenta de la Cámara Hispana de Comercio de Houston, Laura Murillo, en la antigua sede senatorial de Xicoténcatl, la comisionada del INAI, expuso que ha reiterado en numerosas ocasiones la intención y la invitación de dialogar con el nuevo gobierno que presidirá Claudia Sheinbaum y con los legisladores.

Sabemos que las decisiones se tienen que tomar analizando también el costo-beneficio para la sociedad. Y creo que en la agenda de la democracia no pueden quedar fuera de ninguna manera mantener los respetos y libertades y los derechos de todas las ciudadanas, agregó Ibarra, quien concluyó su gestión en diciembre del año pasado pero continúa como comisionada del instituto.

Acerca de las declaraciones que formuló por la mañana el presidente López Obrador de que el INAI podría pasar a formar parte de la Secretaría de Economía, respondió que han sido siempre respetuosos de las distintas posturas que se han dado en torno al trabajo del INAI, pero también han defendido el trabajo del órgano de transparencia.

El INAI, recalcó, ejerce una función sustantiva para el Estado mexicano en defensa de derechos y libertades de las personas.

Insistió en que han mantenido siempre las puertas abiertas para dialogar, para hablar del trabajo cotidiano que hacemos, y también para despejar cualquier duda sobre las tareas que emprendemos.

Es fundamental, agregó, que el INAI mantenga esa autonomía, esa imparcialidad y una labor técnica apegada al derecho, pero sobre todo teniendo como centro de satisfacción a los ciudadanos.

Resaltó que la evaluación está en manos de la sociedad y se requiere que se establezcan mesas de trabajo en que se analice la labor del INAI y ver cómo podemos mejorar el trabajo cotidiano de la institución.