Nezahualcóyotl, Méx., Ante la inacción de los gobiernos de la Ciudad de México y del estado de México, operadores de la Ruta 69 se organizaron y compraron equipo de bombeo para desalojar 60 mil litros de agua pluvial que permanecía estancada desde hace más de dos semanas en un tramo del Periférico Oriente.

Luis Ávalos, dirigente del derrotero, explicó que el cruce de ese intervalo, entre el Bordo de Xochiaca y el ex relleno sanitario Bordo Poniente, se realiza por lo general en cinco minutos, pero la inundación por las lluvias generó severa congestión vial y los conductores tardaban hasta hora y media en atravesarlo.

Periférico Oriente se construyó en los años 90 del siglo pasado para conectar el municipio de Nezahualcóyotl con Ecatepec, pero la vía carece de drenaje pluvial y cada temporada de precipitaciones se anega, justo en la zona limítrofe de ambas demarcaciones.

Las lluvias que provocó la tormenta tropical Chris inundaron la vialidad que a diario utilizan miles de conductores y transportistas de la Ruta 69, que conecta con derroteros de La Paz, de las zonas centro y norte de Neza y de la Quinta Zona de Ecatepec.

Para no seguir perdiendo dinero ni afectar los traslados de los usuarios, los choferes optaron por hacer una cooperacha y adquirieron tres bombas de agua, una planta de luz y una manguera de 100 metros lineales.

Ellos mismos manejaron el equipo y extrajeron miles de litros de agua pluvial estancada.

Ávalos explicó que usualmente es una hora de origen-destino y lo estábamos haciendo en más de dos horas y media solamente de origen-destino, en una vuelta estábamos acumulando más de tres horas de tiempo.

Aseguró que ya desalojaron de la zona del camellón central de Periférico Oriente más de 60 mil litros de agua.

El mantenimiento de esta importante vía de la zona metropolitana está a cargo de los gobiernos de la Ciudad de México y del estado de México.