Sábado 6 de julio de 2024, p. 18
Tulum. Mientras en Tulum empezaban a quitar las tablas con las que estaban protegidas las ventanas, en la ciudad texana de Corpus Christi, mil 500 kilómetros hacia el norte, se agotaban los sacos de tierra para proteger las zonas de la costa más expuestas a los vendavales.
El huracán Beryl se debilitó con rapidez hasta convertirse en tormenta tropical a su paso por la península de Yucatán. Se prevé que recupere fuerza luego de cruzar el Golfo de México el fin de semana y se convierta nuevamente en un huracán antes de tocar tierra el lunes cerca de Brownsville, Texas, área afectada por la tormenta tropical Alberto, hace sólo dos semanas. A su paso por el Caribe, la tormenta golpeó varios países, dejó una estela de destrucción y al menos una decena de fallecidos.
La isla de Carriacou, Granada, quedó completamente arrasada
, de acuerdo con funcionarios de la Organización de Naciones Unidas, por Beryl, el más fuerte de la historia
en esta época del año.
El fenómeno podría entrar por el sureste de Texas como huracán categoría 1 y avanzar rumbo a ciudades como San Antonio y Austin, de acuerdo con la última trayectoria del Centro Nacional de Huracanes; sin embargo, esta ruta no es definitiva.
El vicegobernador de Texas, Dan Patrick, emitió una declaración preventiva de desastre para 39 condados, lo que les permite a las autoridades estatales y locales comenzar a planificar la respuesta ante el vendaval.
En concordancia con la alerta, las compañías petroleras han comenzado a trasladar a los empleados fuera de las plataformas que puedan estar en el camino de la tormenta.