En el caso del maíz, caída de 33%
Sábado 6 de julio de 2024, p. 14
Las lluvias llegaron tarde y debido a la intensa sequía que afectó a gran parte del país en los primeros meses del año, la cosecha de varios productos observa disminuciones importantes, según un análisis de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
La consultora comentó que la siembra total del ciclo otoño-invierno 2023-2024 disminuyó 9 por ciento frente a igual periodo de 2022-2023, mientras la producción de granos, hortalizas y frutas cayó 7 por ciento respecto al mismo lapso anterior.
En particular, la producción de maíz disminuyó 33 por ciento, el sorgo uno por ciento y el trigo 27 por ciento. No obstante, frijol y garbanzo observaron un avance de 33 y 90 por ciento, respectivamente.
El volumen de producción de calabacita cayó 8 por ciento y la cebolla, 4 por ciento.
GCMA mencionó que a pesar de ser un ciclo más estable, la producción total de cultivos de ciclo largo o que su periodo vegetativo se extiende más allá de los 12 meses registró una caída de 3 por ciento anual.
En particular, la caña de azúcar mostró una descenso de 4 por ciento respecto a 2023. El aguacate disminuyó 5 por ciento; la naranja 3 por ciento, mientras el limón aumentó 3 por ciento. El volumen de producción de alfalfa se redujo 4 por ciento anual.
En tanto, la cosecha de primavera-verano observa un déficit total de siembras de 2 por ciento. En el caso del maíz observó una reducción de 0.3 por ciento; sorgo, 14 por ciento, y frijol 9 por ciento. Sin embargo, crecen de manera importante las siembras de soya.
El GCMA anotó que el área sembrada de granos y las oleaginosas para el ciclo primavera-verano observa una disminución de 5 por ciento, seguido de las hortalizas, con 10 por ciento.
En el caso de maíz, se han sembrado 4 mil hectáreas menos que el año pasado, una diferencia de 0.3 por ciento. Para frijol se sembraron 75 mil hectáreas, 9 por ciento menos del avance que se tenía para el mismo periodo del año anterior.
Las hortalizas que más han disminuido en la siembra son la calabacita, con 17 por ciento; el chile verde, 15 por ciento; la papa, 6 por ciento; la superficie para cultivos de cebolla disminuyó 2 por ciento, y el tomate rojo, 8 por ciento frente al ciclo primavera-verano de 2023.
En cuanto a cultivos ornamentales, la consultora destacó que la rosa disminuyó 2 por ciento, mientras la producción de crisantemo aumentó 4 por ciento, la gladiola 0.3 por ciento y la gerbera 5 por ciento.