No se reportaron daños graves tras el paso del huracán Beryl, informó el titular del instituto a La Jornada
Sábado 6 de julio de 2024, p. 3
Tras el paso del huracán Beryl por Quintana Roo, la madrugada de ayer, no se reportaron daños en las zonas arqueológicas del estado, informó Diego Prieto Hernández, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
En un reporte preliminar, el funcionario dijo a La Jornada que se encontraron árboles caídos y caminos interrumpidos por desplomes de ramas y piedras, pero que no se observaron daños en estructuras arqueológicas ni afectaciones al patrimonio cultural. Sin embargo, apuntó, se realizan recorridos exhaustivo, de zonas y sitios arqueológicos con el propósito de documentar incidencias.
Por su parte, Margarito Molina, director del centro INAH Quintana Roo, reiteró que en Tulum, zona que es visitada por 2 millones de turistas al año, hay afectaciones a senderos, ramas caídas y hojarasca, pero nada grave. El sitio ya se bañó, está un poco despeinado
, pero se hará limpieza para reabrir el domingo, los monumentos ahí están, paraditos, sin afectación alguna
.
El antropólogo señaló que los arqueólogos tuvieron que esperar algunas horas para conocer el estado de la zona, porque permanecía la alerta y el paso estaba cerrado por la Guardia Nacional.
Los monumentos principales de Tulum tienen 830 años de haberse construido, ahí, frente al mar; ya se nota el paso del tiempo, pero no se han derrumbado
, comentó.
Agregó que ayudan mucho, en el paso de los huracanes por la costa de Quintana Roo, aspectos de la naturaleza como el arrecife, la duna costera y el manglar, ya que amortiguan el impacto. También, la calidad de la construcción de los arquitectos mayas, que, sin emplear cemento, sino cal, con argamasa de polvo de piedra y saskab, levantaron esos monumentos. Eso es interesantísimo; a veces, más que conocer los estilos arquitectónicos de la civilización maya, habría que profundizar más en la capacidad de construcción, como la orientación ante los vientos o las lluvias. Las casas habitación de los actuales pueblos mayas no son cuadradas, sino elípticas, con el conocimiento de ofrecer menos resistencia al viento y el uso de elementos naturales que permiten microclimas en el interior; es todo un saber ancestral
, detalló.
El antropólogo consideró que continúa la recuperación de visitantes después de la pandemia, además de que, con la fortaleza del peso frente al dólar, a algunos turistas les cuesta más trabajo viajar, pero eso está bien, por la economía del país
. Sin embargo, con la operación del Tren Maya y el presupuesto de Promeza, se están poniendo bonitas las 11 zonas arqueológicas, en las que se trabaja en materia de investigación e infraestructura
.
En el caso de Muyil, unos 30 kilómetros al sur, comentó que tardó más la llegada de los especialistas debido al cierre de carreteras, además de que fue difícil la comunicación debido a las fallas en las redes eléctrica y telefónica, pero, como en la zona de San Gervasio, en Cozumel, tampoco se reportaron daños.
Con información de Patricia Vázquez, corresponsal