Manlio Fabio Beltrones, ex presidente nacional del PRI, expresó su firme e invariable convicción de rechazar la idea de un cambio estatutario que promueva la relección de sus dirigencias.

El próximo senador priísta advirtió que de avalarse, ocasionaría un daño mayúsculo; denunció que al menos en el caso de los delegados de este partido en Sonora, ninguno conoce el lugar en que se celebrará este domingo la asamblea nacional del tricolor ni fueron convocados a las mesas dictaminadoras en que se elaboró la propuesta.

Por separado, Beatriz Paredes Rangel, también ex presidenta nacional del tricolor, coincidió con el rechazo a esa modificación.

En un documento que difundió en sus cuentas de redes sociales, Beltrones dio a conocer que se reunió con los delegados del PRI de Sonora que asistirán a la asamblea nacional. Ante ellos, dijo, rechazó la propuesta de una reforma estatutaria para permitir la relección de dirigentes.

“El daño sería lamentablemente mayúsculo y en sentido contrario a lo que hoy amerita una seria discusión y reflexión de lo que nos ha sucedido en los últimos procesos electorales. Resulta absurdo pensar que esa medida sea –en un caso remoto– la solución a nuestro problema de fondo. Parece una simple e irresponsable decisión”, agregó.

Violenta historia que dio origen al partido

Además, consideró una pésima idea, que hasta parece mala broma, el abordar una situación tan crítica para el PRI con una medida que violenta hasta su historia de cerca de 100 años, basada en un movimiento releccionista que le dio origen.

Anunció que no acudirá a la asamblea nacional a convalidar ese despropósito. Estamos a tiempo de evitar más fricciones y fracturas, advirtió.

Paredes expuso en un documento que dirigió a la comisión organizadora de la asamblea que la actual redacción de los estatutos del partido, en la que se impide la relección de sus dirigentes, se enmarca en el principio que “nutrió el ideal de ‘Sufragio efectivo. No Reelección, que inspiró a la Revolución Mexicana”, así como el nacimiento del Partido Nacional Revolucionario, primer antecedente del PRI.