Viernes 17 de mayo de 2024, p. 30
Un juez federal sentenció a 75 años de prisión a cinco integrantes del cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), considerados responsables del homicidio de Javier Salomón Aceves, Marco Francisco Ávalos y Jesús Daniel Díaz, estudiantes de la Universidad de Medios Audiovisuales CAAV, quienes fueron secuestrados el 19 de marzo en el municipio de Tonalá y posteriormente privados de la vida.
La Fiscalía General de la República (FGR) dio a conocer que por medio de la Fiscalía Especializada en Materia de Derechos Humanos, aportó elementos de prueba suficientes para que se dictara sentencia condenatoria de 75 años de cárcel y reparación del daño a los cinco sentenciados por el delito de secuestro agravado, cometido en contra de los tres alumnos.
De acuerdo con datos del Poder Judicial de la Federación, se identificó a los sentenciados como Eduardo Geovani Gómez, Christian Omar Palma, Alejandro Anaya, Ángel Casillas Pérez y Jonathan Hernández.
El Tribunal de Enjuiciamiento valoró las pruebas aportadas por la FGR y dictó las sentencias a cada uno de los involucrados en este delito.
El 19 de marzo de 2018, las tres víctimas realizaban un trabajo cinematográfico en una casa de la colonia Los Amiales en Tonalá, Jalisco, y al retirarse del lugar fueron interceptados por sujetos que los privaron de la libertad.
Sin saberlo, señalan las indagatorias, la propiedad era utilizada por el cártel Nueva Plaza, organización delictiva contraria al CJNG, y en ella fue capturado en 2015 Diego Gabriel Mejía, quien hasta antes de su detención era uno de los hombres más cercanos a Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, líder del CJNG.
En 2017, Mejía creó un grupo delictivo que disputó el control de la distribución de drogas en los municipios de Tonalá y Tlaquepaque, dos territorios controlados por el CJNG.
En ese contexto, el inmueble en el cual los jóvenes realizaban su trabajo escolar estaba a nombre de la suegra de Diego Gabriel Mejía. La FGR informó que cuando se retiraron del lugar y al circular sobre Periférico Nuevo, del mismo municipio, fueron interceptados y privados de su libertad
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Las investigaciones estaban a cargo de la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado, y ante la presión internacional que se dio en torno al caso, que incluyó declaraciones del cineasta tapatío Guillermo del Toro, la FGR decidió atraer el caso.
A partir de sus pesquisas, el Ministerio Público Federal ubicó varios domicilios en Tonalá, en los cuales encontraron pruebas de que los jóvenes fueron retenidos en esos sitios.
Según la fiscalía de Jalisco, individuos detenidos por este caso declararon que torturaron, golpearon y luego asesinaron a los estudiantes de cinematografía.
Christian Omar Palma Gutiérrez, el QBA, uno de los detenidos, declaró que los cadáveres de los alumnos fueron disueltos en ácido, versión que también ofreció en su momento el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.
A seis años de estar ausentes, los alumnos Javier Salomón Aceves, Jesús Daniel Díaz García y Marco Francisco García Ávalos siguen sin ser encontrados.