Roma. El Papa afirmó que la guerra es un engaño y llamó al reconocimiento entre hermanos, pese a que el planeta está en llamas.

Francisco participó en la segunda edición del Encuentro Mundial sobre la Fraternidad Humana, promovido por la Fundación Fratelli tutti, al que asisten decenas de premios Nobel de la Paz.

La guerra es un engaño, igual que la idea de una seguridad internacional basada en la disuasión del miedo, señaló.

El Pontífice instó a garantizar una paz duradera y aseguró que es necesario situar la fraternidad en el centro de la vida de los pueblos. Sólo así conseguiremos desarrollar un modelo de convivencia capaz de dar un futuro a la familia humana, aseguró.

Para el pontífice, la paz política necesita la paz de los corazones, para que las personas puedan encontrarse con la confianza de que la vida siempre triunfa sobre todas las formas de muerte.

Citó a Martin Luther King a continuación, al señalar que la humanidad ha aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces, pero no el sencillo arte de vivir juntos como hermanos.

También pidió a los asistentes que promuevan con su acción diplomática, el papel de los organismos multilaterales.

Así, apuntó que de ese trabajo puede nacer una carta de lo humano, que incluya, junto a los derechos, los comportamientos y las razones prácticas de lo que hace al hombre más humano en la vida.