Lunes 19 de febrero de 2024, p. 28
La embajadora de Estados Unidos en Rusia, Lynne Tracy (en la imagen), visitó ayer un altar improvisado en Moscú en homenaje al fallecido opositor ruso Aleksei Navalny, cuya muerte en prisión conmovió a muchos ciudadanos que buscaron rendirle tributo, pese a la prohibición de las autoridades. Varios grupos de defensa de derechos humanos reportaron al menos 400 detenidos en concentraciones que se realizaron en recuerdo del crítico del presidente Vladimir Putin, fallecido en una prisión de la región del Ártico el pasado viernes. La diplomática visitó la Piedra Solovetski, monumento levantado en recuerdo de la represión durante el periodo soviético, que se ha convertido en un lugar de peregrinación para los seguidores de Navalny. En tanto, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, se negó a especular sobre el deceso, dijo que el opositor podía haber estado enfermo y advirtió sobre los peligros de banalizar una acusación
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