Lunes 22 de enero de 2024, p. 23
En 2023 México importó 4 millones de toneladas de fertilizantes, cifra sin precedente para un año. Además, dicha cantidad representó un incremento de 14.9 por ciento en comparación con las 3 millones 480 mil toneladas reportadas en 2022, indican cifras de la Agencia Nacional de Aduanas de México.
Según la información recopilada por el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, pese a que el país compró abono al extranjero como en ningún otro año, el valor pagado registró una disminución anual de 30 por ciento, pues mientras en 2022 ascendió a 2 mil 500 millones de dólares, en 2023 se ubicó en mil 734 millones de dólares.
Lo anterior, de acuerdo con el organismo privado, deja ver que México disminuyó su producción y necesitó más fertilizantes del extranjero para satisfacer la demanda interna; sin embargo, la caída en los precios internacionales jugó a favor para no aumentar el gasto.
Los fertilizantes son químicos ricos en nutrientes que se utilizan para mejorar las características del suelo y lograr un mayor desarrollo de los cultivos agrícolas. Su aplicación permite a los productores del campo obtener mayores cosechas de diversos productos e incrementar la oferta en el mercado y sus ganancias.
Dos grandes productores y exportadores de fertilizantes son Rusia y Ucrania, lo que ocasionó que en 2022, el precio internacional de este producto se disparara 74 por ciento al pasar de un promedio de 412 dólares la tonelada en 2021 a 718 dólares en ese año.