e inicia 2024 con una buena noticia: el gobierno decretó 43 nuevas áreas naturales protegidas (ANP). Se rebasa así, dijo el presidente López Obrador, las 41 que declaró en su mandato el presidente Lázaro Cárdenas. Ya son 225 las ANP con que cuenta el país y representan casi 94 millones de hectáreas. Bien por este avance. Mas en todo el sexenio se ha denunciado que para protegerlas los dineros entregados por el gobierno federal no han sido suficientes. Y que en las ANP las instancias oficiales permiten las actividades mineras de varias compañías.
Los datos más confiables indican que en 73 ANP existen dichas explotaciones y hay otras 259 amenazadas con tenerlos en su espacio. El oro es el principal mineral extraído; luego la plata y el cobre. Algunas de las ANP afectadas por explotaciones mineras sobresalen por ser patrimonio mundial de la Unesco: El Vizcaíno, el Santuario de la mariposa Monarca, y el Alto Golfo de California, entre ellas. También en algunas ANP está el crimen organizado que protege a los talamontes.
A estas malas noticias se suma el estado en que se encuentra el lago Cuitzeo, que era el más extenso del país: 4 mil kilómetros cuadrados. Sigue su extinción que aquí denunciamos hace 25 años, cuando el nivel del agua se había abatido 40 por ciento. Ernesto Martínez, nuestro corresponsal en Morelia, informó el jueves pasado que a Cuitzeo el agua apenas cubre 30 por ciento de su superficie original. Sus fuentes alimentadoras se redujeron por la deforestación de las partes altas que lo rodean. Por falta del vital líquido, disminuyeron las actividades agropecuarias y pesqueras. Si hace 25 años en tiempo de secas las polvaredas eran un problema, hoy lo son muchísimo más y afectan la salud de las poblaciones vecinas.
Por lo menos desde el sexenio de Ernesto Zedillo se anunciaron medidas para devolver a Cuitzeo su calidad ambiental. Igual al de Pátzcuaro, que lleva décadas acumulando severos daños por la tala de su área lacustre y, por ende, recibe menos aportes de agua. Todavía no entra en crisis el de Zirahuén, amenazado por asentamientos irregulares, un turismo anárquico, la tala y las aguas negras. Las denuncias de escritores para proteger Zirahuén cayeron en el vacío de las instancias oficiales. Igual las propuestas de los especialistas para garantizar la calidad ambiental de los tres cuerpos de agua mencionados. Ocurre lo mismo con Chapala, Jalisco: cada vez más contaminado y con menos líquido. Y el que tiene, de pésima calidad por los desechos de poblaciones vecinas y las actividades económicas.
Comienza 2024 con alarmantes datos sobre los niveles de los principales embalses de los cuales se surte de agua a millones de familias. Los tres del sistema Cutzamala, en su peor momento por la deforestación y porque no llueve en la cuenca de México. Las autoridades anuncian nuevos recortes a la dotación de líquido a la Ciudad de México y su área conurbada los próximos meses. Los pobres, los más afectados, como siempre. Un problema que también se dará en Guadalajara, Oaxaca, Ciudad Juárez, Tijuana, Veracruz, Xalapa, Cuernavaca, Monterrey, Ciudad Juárez y Acapulco. Agrego el abatimiento del manto freático: se extrae más líquido y a mayor profundidad que el que se recarga por las lluvias. En la Ciudad de México, mayor hundimiento y efectos indeseables con los sismos y las inundaciones en época de lluvias.
Malas noticias también en cuanto al calentamiento global. El mundo está a punto de llegar al límite fijado en el Acuerdo de París en 2015: el umbral climático de 1.5 grados Celsius sobre el nivel preindustrial. Esto significa que la comunidad de naciones no reduce las emisiones de gases de efecto invernadero, tal como prometieron en dicho acuerdo y en las cumbres climáticas celebradas cada año desde entonces. La última, en Dubái… muchas promesas, pocos compromisos reales.
Remato con otra noticia preocupante: nanoplásticos en las botellas de agua. México es el paraíso de las embotelladoras del vital elemento ante la falta de la potable en las redes que surten a los hogares, escuelas, universidades, oficinas públicas, las actividades económicas, el agro… Un estudio reciente encontró hasta 10 mil partículas de plástico por litro en las botellas de agua que se venden en las tiendas.
¿Feliz 2024?