Ferrocarriles Suburbanos –la empresa de participación más pública que privada, a cargo de la operación del ferrocarril de pasajeros en la zona metropolitana de la ciudad y el estado de México– destacó su interés permanente de participar en proyectos para ampliar este tipo de servicio en el país, a la luz del anuncio del presidente Andrés Manuel López Obrador para que el tendido férreo en el país tenga un servicio mixto.

Siempre estaremos interesados en participar en cualquier proyecto público-privado de movilidad, dijo en entrevista con La Jornada, Max Noria, director de Comercialización de Ferrocarriles Suburbanos, a consulta sobre la posible participación de esta compañía en lo anunciado por López Obrador: un decreto para el regreso de los trenes de pasajeros en las vías concesionadas del país.

Sería un hito (...) ver esta posibilidad real, tangible, de que se pueda renovar de manera masiva el tren de pasajeros, comentó Noria, representante de la empresa que desde 2008 opera el Tren Suburbano, y que está a cargo de la construcción del ramal de Lechería al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.

El directivo destacó que la desarrolladora CAF confía tanto en el mercado mexicano que se tiene una planta que ha proveído de carros al Metro de la Ciudad de México y a otros países.

Ferrocarriles Suburbanos (conformado por CAF, Omnitren y el Fondo Nacional de Infraestructura), se impuso frente a Alstom luego de una licitación cancelada en la que la segunda había quedado como virtual ganadora del proyecto, en 2005, tiempo en el que las empresas españolas obtuvieron diversos fallos a favor para desplegar infraestructura en el estado de México, con Enrique Peña Nieto como gobernador, y en concursos federales, con Vicente Fox en la Presidencia.

El Tren Suburbano consiste en una doble vía electrificada de 25.5 kilómetros en la ruta Buenavista-Cuautitlán, con cinco estaciones y dos terminales, por la que pasan 20 trenes eléctricos de cuatro vagones. Del total de la inversión por 10 mil 678 millones de pesos, 5 mil 611 millones provinieron del Fonadin y 5 mil 67 millones de la participación privada.

Noria subrayó que revivir todo el sistema ferroviario de pasajeros tendrá sobre todo una rentabilidad social, pues de acuerdo con las encuestas sobre el proyecto del Suburbano entre sus pasajeros, se ha visto una mejora en la calidad de vida, también tiene un impacto en el ambiente y en el ordenamiento territorial, comentó.